El Ministerio de Sanidad da vía libre para celebrar la Misa del Gallo a medianoche. Así se desprende de las recomendaciones que se dieron a conocer ayer tras el Consejo Interterritorial, El retraso del toque de queda en Nochebuena y Nochevieja a la 1:30 horas en lugar de a una de la madrugada como se planteó en el borrador inicial, ofrece un margen de maniobra para celebrar la tradicional eucaristía a las doce en punto, con el margen suficiente para regresar a casa antes del horario límite marcado por el Gobierno y las Comunidades Autónomas.
También ha desaparecido de este documento final la sugerencia para adelantar las celebraciones religiosas, de lo que se deduce que la misa no estará en el punto de mira de las autoridades públicas. Simplemente se recuerda que “la celebración de eventos religiosos, tales como la misa del gallo, no será óbice para el cumplimiento de la regulación relativa a la limitación de la libertad de circulación de las personas en horario nocturno”.
Con respecto al primer documento que se manejó inicialmente, sí se mantiene, en cambio, la propuesta de “evitar los cantos y usar en su lugar música pregrabada”. De la misma manera también se recomienda “ofrecer como alternativa servicios telemáticos o por televisión”.
De la misma manera, tal y como viene sucediendo desde que la pandemia irrumpiera en nuestro país en marzo, “se deberán evitar las muestras físicas de devoción o tradición (besos, contacto sobre imágenes, esculturas, etc.) sustituyéndolas por otras que no conlleven riesgo sanitario”. En este sentido, al igual que en Semana Santa, en este caso no podrá llevarse a cabo la tradicional adoración al Niño Jesús -con los correspondientes besos a la imagen- que se realiza después de cada una de las misas navideñas.
En relación al aforo, el Ministerio de Sanidad deja una vez más en manos de cada comunidad y ciudad autónoma las restricciones en lo que a limitación de personas se refiere “en espacios cerrados” según las normas ya establecidas.