El arzobispo de Bogotá y primado de Colombia, Luis José Rueda Aparicio, ha hecho un llamado a los colombianos a “jugárnosla por la reconciliación y la paz” con motivo de la celebración de la Navidad. Así lo ha manifestado en una entrevista concedida a Margarita Rojas de Noticias Caracol.
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Celebraciones responsables y con protocolos
¿Cómo será la celebración de la Navidad este año? “La Navidad va a ser en la responsabilidad de los protocolos, pero propiciando que todos podamos celebrar en nuestros hogares y en las parroquias con pequeños grupos y con muchos cuidados“, respondió Rueda Aparicio, resaltando que las celebraciones se realizarán en el marco de la normativa gubernamental y de acuerdo con los aforos permitidos.
Al hacer un balance sobre el año que concluye, el arzobispo de Bogotá se refirió a las facetas de dolor y de sufrimiento por las que ha transitado el país: “por un lado, el Covid, pero por otro lado la situación del país”, pues “pensábamos que íbamos a tener un panorama más positivo en el respeto a la vida de los colombianos y de los líderes que acompañan las bases”. “Sin embargo, hay muchos signos de violencia”, lamentó el prelado.
Mártires de la reconciliación
Ante los factores de violencia, Luis José Rueda ha hecho un llamado al país: “nos toca jugárnosla por la reconciliación y la paz”, destacando el trabajo de los líderes sociales, “estos hombre y mujeres que están muriendo, estos mártires de la reconciliación y de la paz”, continuó, subrayando que “los necesitamos para reconstruir el tejido social”, con la confianza puesta en el Dios de la vida.
¿Por qué los están matando?, lo interrumpe la periodista. Su respuesta es clara: “todo aquel que trabaja por la paz y que hace una propuesta por la vida, incomoda, entonces lo que buscan es llenar de miedo a los colombianos, y nosotros no podemos llenarnos de miedo”.
Coherencia ante los casos de abusos
En la última parte de la entrevista el arzobispo de Bogotá abordó el tema de los abusos sexuales en la Iglesia. “La Iglesia ha asumido con humildad y con responsabilidad esta tarea, desde el mismo papa Francisco en adelante”, dijo ante las cámaras de Caracol, refiriéndose a la cooperación y a la claridad con la que la Iglesia está colaborando con las autoridades civiles en Colombia, atendiendo a las víctimas, cuidándolas y previniendo, “porque se trata de corregir los errores que hemos cometido, ser capaces de denunciar y llevar a la fiscalía [los casos], en línea de prevención, de corrección y de atención de los procesos, buscando que las víctimas sean sanadas, acompañadas y que quienes son culpables y tienen que pagar ante la justicia, lo hagan, y en eso la Iglesia ha sido coherente”.
Rueda Aparicio se refirió, en concreto, a la Oficina del Buen Trato que atiende y acompaña los casos de abusos sexuales en la arquidiócesis de Bogotá –como también ocurre en otras jurisdicciones eclesiásticas del país–, “donde la víctima, con toda confianza, con profesionales que los atienden, los escuchan y enrutan la problemática, para que de una vez, si se trata del abuso, por ejemplo, de un menor de 18 años, sea llevado también ante las autoridades civiles”.
Con más celeridad, más claridad y poniéndose en el lugar de las víctimas, en primer lugar, la arquidiócesis de Bogotá busca dar respuestas eficaces al flagelo de los abusos en la Iglesia. Así ha ocurrido en los cuatro casos que se han tramitado durante este 2020 donde se encuentra comprometido algún religioso de la arquidiócesis. Incluso, “uno de ellos se encuentra privado de la libertad y está en proceso, a la espera de la sentencia” que dicte la justicia civil.
