Los obispos de la Conferencia Episcopal Uruguaya (CEU) comunicaron a los medios la decisión de acatar el pedido del Gobierno de suspender las celebraciones con la presencia de los fieles.
Si bien las iglesias seguirán abiertas, las celebraciones se transmitirán por medios de comunicación y redes sociales. Esta medida se cumplirá hasta, al menos, el 10 de enero.
Durante la conferencia de prensa, los obispos Daniel Sturla, Arzobispo de Montevideo y Milton Tróccoli, Obispo de Maldonado – Punta del Este – Minas, y secretario general de la CEU, señalaron que “la cercanía de la Navidad hace doblemente dolorosa esta decisión”.
Recordaron que, anteriormente, hubo una medida similar entre marzo y junio, lo que llevó a no poder celebrar presencialmente la Semana Santa. Ahora, “nos toca nuevamente vivir una fiesta religiosa sin presencia de fieles. Lo hacemos y tratamos de contribuir al bien de todos y a la paz del mundo”.
Ambos obispos recordaron que, como Iglesia, “ya habíamos suspendido una cantidad de actividades, entre otras: campamentos, misiones juveniles, recorridas por los barrios”.
Ante la solicitud de las autoridades civiles, ahora decidieron acompañar la medida. “Confiamos en que seguiremos cuidándonos entre todos y que con la ayuda de Dios pronto podremos salir de esta situación y volver a celebrar nuestra fe en comunidad“, expresaron los obispos de Uruguay.