Durante la pandemia de Covid-19, la devoción a Dios, a la Virgen María y a los santos ha aumentado, lo mismo que la oración personal, mientas que se mantuvo la participación de los fieles en la Santa Misa a través de las redes sociales.
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Lo anterior se desprende de una encuesta realizada por el Centro Pastoral de Investigaciones de la Arquidiócesis de Monterrey, con el objetivo de conocer más sobre el ejercicio de la fe de las personas en dicho territorio eclesial, durante la pandemia.
En el estudio también se observa un incremento en la solidaridad de los fieles a través de obras de caridad hacia los más afectados por la crisis de salud.
Detalles de la muestra
En entrevista para Vida Nueva, el sacerdote José Francisco Gómez Hinojosa, vicario general de la Arquidiócesis de Monterrey y director del Centro Pastoral de Investigaciones de esa Iglesia particular, dio a conocer algunos detalles sobre el estudio.
Explicó que la encuesta se practicó a 5,007 personas luego de que el arzobispo Rogelio Cabrera López manifestara su preocupación, en el sentido de que la suspensión de las actividades de culto, a causa de las restricciones impuestas por la pandemia, pudiera afectar la devoción de los fieles.
Los rangos de edad de los encuestados son: el 54%, fueron personas de entre 41 a 60 años; el 23%, de más de 61 años; el 18%, de 21 a 40 años, y el 5%, de menos de 20 años. Todos los fieles asisten con cierta regularidad a los templos para participar de los servicios religiosos, reuniones de grupos, pláticas, talleres, preparación de misiones, etcétera, y pertenecen a las 13 zonas pastorales en que está dividida la Arquidiócesis.
La vida de las parroquias se ha visto afectada
Si bien en lo general la fe y la devoción de los fieles laicos regiomontanos ha crecido, en un 10% de la muestra se registró una disminución, lo cual se debe en gran medida a la imposibilidad de asistir a las celebraciones litúrgicas de forma presencial.
El sacerdote explicó también que en la variable: “Relación con los demás miembros de la comunidad”, se observó que la mayoría de las personas respondieron: “Más alejados”, lo que posiblemente podría explicarse –dijo- a partir de la imposibilidad de convivir con el resto de miembros de la comunidad debido al confinamiento por la pandemia.
Precisó que han sido los grupos parroquiales, especialmente de jóvenes, los que más han resentido los efectos de la pandemia. “Y piden de sus párrocos –con frecuencia preocupados por cuestiones administrativas ante la falta de recursos económicos– una mayor cercanía, mejor claridad y estructura en las actividades extraordinarias a causa de la contingencia”.
Resultados que impulsen una atención más proactiva
Para el Director del Centro Pastoral de Investigaciones, los resultados de la encuesta deben ayudar a la Iglesia de Monterrey a “Mirar contemplativamente, escuchando. Discernir comunitariamente, entendiendo. Y actuar misericordiosamente, atendiendo”.
El sacerdote José Francisco Gómez Hinojosa manifestó su seguridad en que, al ser presentados los resultados de la encuesta a los sacerdotes en las reuniones de presbiterio y compartidos en distintos lugares con laicos y miembros de la vida consagrada, se logre un impulso en la creatividad pastoral, la cercanía a las necesidades de las personas y una atención más proactiva.
Finalmente, destacó que la encuesta, el análisis y el discernimiento de los datos ha sido hecho por laicos y sacerdotes con experiencia en el campo de la sociología, la mercadotecnia, el talento humano, la filosofía, la teología y la pastoral, entre otras disciplinas.