El 3 de enero de 1521, el papa León X excomulgó a Martín Lutero y a todos sus seguidores. Ahora se han cumplido 500 años de esta expulsión de la Iglesia, y católicos y luteranos se han unido para conmemorar dicha excomunión –como ya hiciera con el año Lutero y el viaje de Francisco a Suecia–. El Vaticano y la Federación Luterana Mundial preparan, entre otras cosa, un encuentro en el mes de junio, en Roma, para recordar el camino ecuménico de las últimas décadas.
Eso no es todo. El cardenal Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, ha confirmado a los medios vaticanos, que ambas instituciones preparan un “Palabra común”, un documento de gran alcance que busca abrir preguntas desde una perspectiva ecuménica. Para Koch, la expulsión de Lutero de la Iglesia representa “todavía una dolorosa herida en la historia de la separación católico-luterana”. Por ello, el documento busca continuar “el camino de la reconciliación bajo la guía del Evangelio”.
Sobre lo que no se ha pronunciado el cardenal es sobre la petición hecha por algunos teólogos pidiendo la retirada oficial de la excomunión de Lutero como un gesto ecuménico. El portal Katholisch.de recuerda que en este sentido se han pronunciado Johanna Rahner para quien con esta retirada “la Iglesia Católica podría expresar su aprecio por los protestantes de hoy”. Por su parte, el obispo de Augsburgo Bertram Meier, ha rechazado esta posibilidad porque “la excomunión del reformador ya fue levantada con su muerte. Así que un acto formal ya no es necesario”.