Francisca González Justo (Mª Teresa de religiosa), fue religiosa de la congregación de Hermanas de Nuestra Señora de la Consolación y a quien, desde 1992, la Iglesia la reconoce como venerable. Y mañana, 11 de febrero, su congregación celebra el centenario del nacimiento de Paquita, como llamaban en casa y sus amigas a esta joven sencilla y llena de ilusiones.
A los 20 años ingresó en el noviciado y después de su profesión religiosa, en el año 1943, pasa a servir a los enfermos de tuberculosis. María Teresa falleció joven y junto a sus enfermos el 12 de octubre de 1967. Solo 35 años después, Juan Pablo II reconocía sus virtudes heroicas por su labor.
Consejos a los jóvenes
Pero, si por algo merece celebración y recuerdo su vida es por su mensaje a los jóvenes, desde su propia experiencia como tal en una España de guerra civil y posguerra en la que podía elegir, como los jóvenes de cualquier época, entre dedicar su vida a lo grande y heroico o, por el contrario, a lo fácil.
Si por algo destacó María Teresa fue por su libertad para actuar de acuerdo a su propio criterio, manteniendo sus prioridades y siempre bajo la luz de su fe. Por eso su vida es un mensaje joven que llama hoy a la juventud del s. XXI. Con el testimonio de su propia vida, esta venerable de la Iglesia propone a los jóvenes de hoy cinco consejos:
1. Se fiel a ti mismo, no te dejes manipular
2. Ten criterios claros y convicciones fuertes
3. Traza tu ideal y no escatimes esfuerzos para conseguirlo
4. No pienses en ti mismo, eres parte de un cuerpo inmenso que te necesita.
5. Todo es posible para quien tiene fe y confía en el poder de la Resurrección de Jesucristo.