El aeropuerto internacional de Erbil, una de las ciudades más grandes de Irak, ha sufrido el ataque de tres misiles, uno de los cuales ha impactado en una base militar estadounidense, dejando al menos 1 muerto y ocho heridos. El ataque ha sido perpetrado por el grupo terrorista chií ‘Los guardianes de la sangre’ en venganza “por las muertes de los líderes martirizados”.
El ataque ha tenido lugar cuando apenas faltan tres semanas para el viaje del papa Francisco a Irak, planeado para producirse entre el 5 y el 8 de marzo, y en el que está planeado que visite Erbil el día 7, donde se reunirá con las autoridades religiosas y civiles de la región autónoma del Kurdistán Iraquí en el propio Aeropuerto.
Búsqueda de los culpables
Por su parte, las autoridades iraquíes han anunciado que están investigando la autoría del ataque. Asimismo, el Partido Democrático del Kurdistán ha advertido que los culpables “tendrán que pagar las consecuencias de sus actos”.
En Estados Unidos, el secretario de Estado Antony Blinken asegura que el país está dispuesto a ayudar en la investigación para descubrir a los culpables. Además, ha lamentado “el sufrimiento por el que están pasando los iraquíes a raíz del bombardeo”.