Un 54,6% de la población catalana asegura que no tiene ninguna creencia religiosa. Así lo ha revelado el tercer ‘Barómetro sobre la religiosidad y sobre la gestión de su diversidad’ publicado por la Dirección General de Asuntos Religiosos de la Generalitat de Cataluña.
- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
Sin embargo, en un comunicado de la Conselleria de Justicia, la Generalitat ha precisado que esta cifra apunta únicamente al hecho de la creencia o la práctica de alguna religión, pero que, sin embargo, el 71% de los catalanes se identifica con alguna de ellas, ya sea por motivos de fe o culturales. Así, un 53% se identifica con el catolicismo; un 7% con el protestantismo; un 4,3% con el Islam; un 1,3% con el cristianismo ortodoxo y un 1% son testigos de Jehová. Por otra parte, un 18% se declara ateo y un es 8,8% agnóstico.
Asimismo, un 68,1% de los catalanes afirma que no asiste nunca a una ceremonia de culto, de cualquier religión. En cuanto a los que asisten a estas, según el barómetro, un 9,7% lo hacen una vez a la semana semana, un 5,3% asiste una vez al mes y el 16,6% una vez al año.
Tendencia a la espiritualidad
Por otra parte, mientras el 26% afirma no identificarse con la frase “no creo en Dios”, el 16,6% no cree en un Dios “personal”, pero sí “en alguna manera de poder superior”. Además, el 11,2% tiene dudas, pero siente “que Dios existe”, y el 24,2% sabe “que Dios existe de verdad” y no “tiene ninguna duda al respecto”.
Así, la espiritualidad parece ganarle, poco a poco, el terreno a la religión. Por otra parte, solo el 21,4% de los catalanes no está “nada de acuerdo” con considerarse una persona espiritual. Además, un 28,6% de los encuestados se identifica con la frase “no soy seguidor de ninguna religión, pero me considero una persona espiritual, interesada en lo trascendente”.
Asignatura de religión
Este estudio se realiza a partir de un cuestionario de unas sesenta preguntas que se distribuye a una muestra de 1.600 personas mayores de 16 años. Los resultados obtenidos del mismo, además, son relevantes en el sentido de que, al ser distribuida la encuesta entre la población inmigrante, refleja una imagen bastante precisa de cuál es la situación actual de la sociedad catalana en cuanto a la cuestión religiosa.
Además, el estudio muestra que el 66,9% de los catalanes consideran que es muy o bastante importante disponer de algún conocimiento sobre la diversidad religiosa para comprender algunas expresiones culturales o artísticas o determinadas situaciones políticas. Asimismo, el Barómetro señala que en torno al 5% de los catalanes se han sentido discriminadas por motivos religiosos.
En cuanto a la educación en materia religiosa, existe un amplio consenso –un 70%– en cuanto a que el sistema educativo incorpore de alguna manera el hecho religioso, en concreto, con una asignatura en la que se de formación a todos los niños acerca de las principales religiones del mundo. Del mismo modo, se considera muy importante que las confesiones cooperen y dialoguen y que las instituciones públicas promuevan este diálogo.