‘Contar la verdad para seguir viva’. Así se titula el documental con el que Rocío Carrasco confiesa que ha sido maltratada. El 31 de marzo de 1996 decidía que iba a casarse, vestida de blanco, con Antonio David Flores. Sin embargo, tres años después se les rompió el amor. En abril de 2007 –casi un año después de la muerte de Rocío Jurado– el Tribunal de la Rota confirmaba la nulidad del matrimonio alegando “un caso claro de inmadurez”, como ha confirmado Vida Nueva de fuentes cercanas al procedimiento canónico.
El cardenal arzobispo emérito de Sevilla, Carlos Amigo, aseguraba en 2003, al conocerse la primera sentencia, que las causas de la nulidad estaban “muy estudiadas”. Las mismas fuentes citadas por esta revista afirman que las dos sentencias –confirmadas por la Rota– aplicaban el canon 1.095 del Código de Derecho Canónico.
Este, en su Capítulo IV sobre el consentimiento matrimonial, señala que son incapaces de contraer matrimonio “quienes carecen de suficiente uso de razón, quienes tienen un grave defecto de discreción de juicio acerca de los derechos y deberes esenciales del matrimonio; y quienes no pueden asumir las obligaciones esenciales del matrimonio por causas psíquicas”.
Este canon es el utilizado por la Iglesia en el 95% de las sentencias de nulidad advirtiendo siempre la inmadurez de uno o los dos contrayentes a la hora de recibir el sacramento. En esos momentos, en 1996, ‘Rociíto’ tenía justo 18 años y 20 el ex guardia civil.
Ambos se dieron el ‘sí, quiero’ en la ermita de la finca de la Yerbabuena (Sevilla), propiedad de Rocío Jurado, donde un año antes se casaba también con el torero José Ortega Cano tras obtener la nulidad de su matrimonio con el boxeador Pedro Carrasco, quien a su vez se casaba el mismo año que su hija con Raquel Mosquera, también por la Iglesia –concretamente en la parroquia de Nuestra Señora de la Gracia (Huelva)–.
Pese a que esta y no otra es la razón a la que aluden las sentencias canónicas, hace apenas cuatro meses, cuando por la cabeza de Antonio David Flores no pasaba ni de lejos la posibilidad de que su ex mujer contara su verdad, explicaba que Rocío Carrasco dijo durante el proceso eclesial que él le había instado a abortar a su segundo hijo, David Flores. Un motivo que, según él, es “utilizado” en el procedimiento de nulidad para disolver el matrimonio.
Estas declaraciones las hacía en el espacio ‘Quiero dinero’ dentro de ‘Sálvame Tomate’. La realidad es que Jorge Javier Vázquez le hizo la siguiente pregunta: “¿Le pediste a Rocío Carrasco que abortara cuando se quedó embarazada de tu hija Rocío?”. Su respuesta negativa y la confirmación a la versión de Antonio David por parte de ‘Kopérnica’–la máquina de la verdad– le valieron ganar 1.500 euros. Ya después, explicaba que no había sido con su primera hija sino con el segundo, pero negaba la mayor.
Sobre su nulidad, recalcaba en el programa de Telecinco que fueron momentos “difíciles” para él, porque “me acusaron de cosas feas, muy duras, simplemente con la intención de que se disolviera el matrimonio, y creo que se fue cruel conmigo”.
Del mismo modo, acusaba a la Iglesia de hacer negocio con las nulidades. “Pagando le dan la nulidad a cualquiera. Hay un artículo que le llaman el artículo del canon coladero y se la dieron a otros personajes conocidos. Es algo así como la inmadurez, cosas que no se pueden demostrar”, sentenciaba él.
E iba más allá: “El presidente del Tribunal Interdiocesano de Sevilla –el sacerdote Francisco Gil Delgado, ya fallecido– conmigo se portó muy mal. Este tío fue tan duro, tan cruel, y sin ningún tipo de prueba argumentaron una sentencia muy dura, en la que se dijeron absolutas barbaridades sobre mí”.
La realidad es que en los capítulos 2 y 3 (se emitirán este domingo 28 de marzo) del documental que ha sobrecogido a España –clase política incluida, pues la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha llegado hasta a intervenir esta semana en ‘Sálvame’–, según el tráiler avanzado en el programa insignia de La Fábrica de la Tele, Rocío relata cómo vivió el embarazo de su segundo hijo.
“El embarazo te está afectando a la cabeza, los celos te están volviendo loca, por culpa de los celos vas a malparir”, llega a confesar la hija de ‘la más grande’ que le dijo el hombre que para ella no tiene nombre, pues solo se refiere a él como “una mente diabólica”.
Diez años después de que la Rota confirmara la sentencia, José Antonio Rodríguez –marido de Gloria Mohedano y tío de Rocío Carrasco–, en medio de la batalla judicial entre su sobrina y Antonio David Flores, advertía en televisión que mintió en el juicio canónico para beneficiar a su sobrina, con la que entonces tenía buena relación; no es así ahora, pues los Mohedano –al menos hasta antes de la emisión del documental– están del lado del ex guardia civil y critican que Rocío no se haga cargo de sus dos hijos.
Ya con la nulidad, en 2016, de nuevo en el punto de partida, contraía matrimonio con Fidel Albiac, aunque esta vez sin pasar por el altar, pese a haber podido hacerlo.