Elsa Campa: “Las contemplativas tenemos una palabra que decir”

18/04/2021 | José Beltrán

Vida Nueva conversa con la carmelita que se estrena como consultora de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica

EDITORIAL: La voz contemplativa que faltaba en Roma

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A pie de obra. Literalmente. Elsa Campa lo mismo acompaña al albañil para apañar esas grietas que aparecen en todas las casas, que se pone a revisar las cuentas de los monasterios a su cargo. Priora de las Carmelitas de Alba de Tormes y de Villagarcía de Campos, es también la presidenta de la federación de monasterios San José Castilla-Burgos. Desde el 10 de abril, y durante los próximos cinco años será consultora para la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCSVA).

La primera contemplativa, al menos en España, que asume esta responsabilidad. Junto a ella, otros 15 consultores, entre ellos, los españoles María José Tuñón Calvo, directora del secretariado de la Comisión Episcopal de Vida Consagrada; Alejandro Arellano, decano del Tribunal de la Rota Romana; y Xabier Larrañaga Oyarzabal, decano del Instituto Claretiano de Teología de la Vida Consagrada de Roma.

PREGUNTA.- ¿No le desborda tanta responsabilidad ahora?

RESPUESTA.- Saldremos adelante organizándonos un poco y priorizando lo urgente y lo importante. A lo que llegamos, llegamos. Y lo que no, se quedará a la espera. En cualquier caso, no me siento sola, sino acompaña por la comunidad.

P.- ¿Sorprendida por la designación del Papa?

R.- Sí, la verdad. Recibir una carta solemne de la Secretaría de Estado con un nombramiento del Papa en nuestra vida tan sencilla, impresiona. Poco a poco lo asimilé y ahora se añade un sentimiento de emoción por los correos y llamadas de tantas hermanas y hermanos que se sienten representados, que me apoyan y me animan.

En plena reforma

P.- ¿Ya era hora de que se ‘consultara’ de una manera estable a las contemplativas?

R.- Lo cierto es que no teníamos constancia, al menos en España, de una designación de este tipo. Es una responsabilidad y confianza depositada en mi persona, que tiene gran alcance para todos los contemplativos. Sentimos que la Iglesia confía en nosotros en tanto que piensa que una monja contemplativa tiene una palabra que decir, temas en los que deseen saber nuestra opinión, en definitiva, ayudar. Es un hito importante. Ahora le toca a esta sencilla hija de Teresa de Jesús, pero estoy convencida de que más adelante tomarán el relevo hermanas de otros carismas.