La sección 4ª de la Audiencia provincial no observa indicios de delito en la actuación de la Fundación para el V Encuentro Mundial de las Familias
Benedicto XVI visitó Valencia en 2006 con motivo del V Encuentro Mundial de las Familias que se celebró en la ciudad del Turia. Desde entonces han coleado las sospechas de corrupción en sintonía con otras causas abiertas a instituciones políticas valencianas. Sin embargo, la sección 4ª de la Audiencia de Valencia ha archivado definitivamente la causa penal sobre estos actos. El juez Pedro Castellano ha confirmado, de forma más contundente, el sobreseimiento provisional que había dictado la juez de Instrucción 5. Ninguno de los dos tribunales observan indicios de delito de corrupción en las actuaciones de la Fundación para el V Encuentro Mundial de las Familias.
Entre los imputados en esta causa estaba el obispo auxiliar de Valencia Esteban Escudero, coordinador entonces de dicho encuentro. Junto a él político como el expresidente Camps, y su ex vicepresidente, Víctor Campos, así como otras personas de sus equipos. Por el juicio pasaron el obispo de Tortosa Enrique Benavent, el obispo auxiliar de Valencia Vicente Juan Segura, el de Lérida Salvador Giménez, y también el cardenal jubilado Manuel Monteiro de Castro, que en 2006 era nuncio en España. Los tribunales han aceptado la versión de la Fiscalía para archivar la causa. La gestión del evento a través de una Fundación privada era la principal baza la acusación como muestra de que se querían evitar los controles al respecto.
En este sentido, según el auto del juez, “es razonable pensar que la intención de estos al hacer el diseño formal de la Fundación fue la de alcanzar el buen fin del evento ajustando las herramientas jurídicas a las necesidades y características de su objeto material”, ya que no se ha probado otra cosa “tras cinco años de pesquisas, que a través de los contratos se hubiera favorecido a determinados contratistas o a la Fundación misma, constando que todas las empresas contratistas han justificado y explicado tanto sus trabajos como la remuneración percibida”.
Tampoco queda probada la malversación de casi 3 millones y medio por parte de la Generalitat a través de esta fundación, algo que considera normal por la naturaleza del evento organizado y los gastos de la fundación. Para el juez también queda probada la difusión de la imagen de Valencia a todo el mundo a través del “buen desarrollo de los actos del Encuentro Mundial de las Familias, por ser de notorio y público conocimiento el inmenso número de personas asistentes directamente a los mismos y el ingente seguimiento que tuvo a través de los medios de comunicación”. Por ello, no se puede consideras que dicho dinero ha ido al patrimonio privado de nadie, sino para el desarrollo de un acto de interés general.
El voto unánime de los tres magistrados de esta sección hace que el archivo de esta causa sea definitivo. Se ratifica la el sobreseimiento provisional que se había decretado en diciembre de 2020. Al hacerse firme, contra esta resolución ya no cabe recurso.