El papa Francisco ha enviado un telegrama con su “más sentido pésame y la seguridad de sus oraciones” al arzobispo de Seúl, el cardenal Yeom Soo-jung, tras conocer la noticia del fallecimiento ayer, 28 de abril, del emérito cardenal Nicholas Cheong Jinsuk mientras recibía tratamiento hospitalario.
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Así lo daba a conocer Oficina de Prensa de la Santa Sede, desde donde se ha señalado, además, que el Papa se une “a todos los fieles reunidos en la solemne misa de funeral para encomendar la noble alma del fallecido cardenal al amor compasivo de Cristo, el Buen Pastor, por los muchos años de servicio a la Iglesia en Corea y a la Santa Sede”.
La fe de Corea del Sur
Del mismo modo, ha querido impartir su bendición Apostólica “como prenda de consuelo y paz en el Señor resucitado a todos los que lloran el fallecimiento del difunto cardenal, en la segura esperanza de la resurrección”.
El purpurado, Nicholas Cheong Jinsuk, arzobispo emérito de Seúl (Corea del Sur), fallecía a los 89 años. Fue creado cardenal por Benedicto XVI en 2006, y ejerció su ministerio como arzobispo de la capital surcoreana durante 14 años, hasta 2012, dedicando su vida a la promulgación y oración por la fe católica en el país asiático.
