El papa Francisco ha visitado hoy, 20 de mayo, la sede vaticana de Scholas Occurrentes en el Palacio de San Calisto (Roma). Allí, se ha reunido con jóvenes de distintas regiones de Italia que participaron de la primera parte del programa de Salud Emotiva durante la pandemia. Los estudiantes, acompañados de un grupo de docentes, han compartido sus experiencias al Santo Padre y al Ministro de Educación, Patrizio Bianchi, y distintas autoridades del Ministerio de Salud.
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Francisco también se ha reunido con jóvenes de Iberoamérica quienes le presentarán las conclusiones del encuentro realizado días antes en Madrid sobre el tema ‘Soñar juntos el camino hacia un futuro mejor’. Además, se ha conectado en directo con estudiantes de las nuevas sedes de Scholas en Sidney, Australia; en Valencia, España, y Washington, Estados Unidos, y ha escuchado con los jóvenes argentinos de la zona de El Impenetrable, en Chaco, para dar inicio al nuevo programa de arte y prevención de adicciones.
En el estadio del Levante, en Valencia, le esperaban no solo los jóvenes. Estaba también presente el cardenal Antonio Cañizares, el presidente del Levante Unión Deportiva y el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig. Ninguno ha dudado en insistir al Papa que España –y Valencia, en particular–, le esperan. “Cuando Dios disponga le esperamos en Valencia para que podamos darle un abrazo muy grande todos”, ha dicho Cañizares.
Un bien para la escuela pública y la concertada
“Aquí, hoy le reciben los jóvenes que son dinamismo y alegría, esa alegría que usted transmite continuamente”, ha afirmado el cardenal. “Gracias, papa Francisco, por Scholas, porque aquí en Valencia nos está ayudando mucho, tanto a la escuela pública como a la concertada. Gracias porque necesitamos una escuela nueva que cree personas que se respeten, que estén al lado de los pobres, de los últimos, los marginados y los migrantes”, ha continuado, recordando al Papa la situación que se vive estos días en nuestro país con respecto a los migrantes que han cruzado desde Marruecos. “Usted nos está ayudando con sus gestos en Lampedusa, en Irak”, ha reconocido
“Hoy le recibimos aquí el honorable presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, y yo, porque la Iglesia no está separada de la sociedad. Al contrario. Tenemos que estar unidos, trabajando en común”, ha asegurado el arzobispo de Valencia. “Eso es lo que Scholas y usted nos está enseñando: el encuentro, a trabajar en común”.
Por su parte, Puig ha subrayado que la última encíclica del Papa, ‘Fratelli Tutti’ “es muy importante para la humanidad”, porque “la fraternidad está por encima de cualquier frontera”. “Cuando vemos a niños morirse en el mar, cuando vemos las guerras que existen en el mundo, siempre debemos recurrir a la misma palabra: fraternidad. Papa Francisco, sus palabras son siempre un faro para la humanidad”, ha aseverado el presidente de la Generalitat.
Volver a la sencillez
Asimismo, el presidente del equipo, Francisco Javier Catalán, ha señalado al Papa que “le recibimos con el rojo y el azul de su San Lorenzo, y con el rojo y el azul que es el color del Levante Unión Deportiva”. “Seguro que esos colores nos han hecho llorar de alegría y también de pena. Pero el futbol es un juego, y eso tienen que ver los jóvenes: que de la victoria y la derrota también se aprende”, ha afirmado el presidente del club de fútbol. “Le tengo que pedir, Santidad, que nos tenga muy presentes a los valencianos, que siempre nos tenga en su equipo”, ha concluido.
Cuando el joven Andrés le ha preguntado por qué es tan importante “volver al origen, a la sencillez”, el Papa le ha contestado: “Siempre la identidad la reencontramos, y la hacemos crecer en ese reencuentro. Una persona que se olvida de donde viene, es una persona que amputa su historia. Tenemos un origen que de alguna manera tiene un significado durante toda la vida. Una pelota de trapo es recordar el origen, donde la gratuidad del juego resulta ser mucho mejor que la sofisticación ulterior. Es volver al origen de que el juego era la gratuidad de encontrarse. En el deporte y en la vida, si perdemos la gratuidad perdemos el partido”.
En el encuentro se encontraba también el Ministro Educación italiano, Patrizio Bianchi, quien ha asegurado que en Italia están “trabajando mucho en la educación tras la pandemia. Pero no solo la del coronavirus, sino también la pandemia del individualismo”. “Ahora estamos pensando en cómo debe ser la nueva escuela, y creo que tiene que ser afectuosa, como nos enseña Scholas”, ha continuado, asegurando al Papa todo su apoyo al Pacto Educativo Global. “Tenemos que salir de la cuarentena no solo física, sino del ánimo. Y esto es salir al encuentro del otro”.
