Una tirada de 3.000 ejemplares circula en el país para promover los lineamientos de protección entre agentes de pastoral y evangelización
Bajo el sello editorial de PPC Colombia, ha visto luz la segunda parte del seriado ‘Nuestra Iglesia, un hogar seguro’, iniciativa que abandera la arquidiócesis de Bogotá con el apoyo de la agencia alemana Kindermissionwerk.
Vida Nueva ha conversado con Luis Manuel Alí, obispo auxiliar de Bogotá y miembro de la Comisión pontificia de protección de menores para América Latina y el Caribe, sobre esta segunda publicación que busca establecer los lineamientos de prevención de abusos sexuales en toda Colombia.
El prelado asegura que “la publicación forma parte de un primer texto de dos, que tenemos planificados en estos dos años. Este primero trata sobre los lineamientos de prevención para trabajar y seguir evangelizando a nuestros niños, niñas y adolescentes y personas vulnerables”.
Han realizado una tirada 3.000 ejemplares, que darán a conocer en las 76 jurisdicciones colombianas por disposición de Luis José Rueda, arzobispo de Bogotá y primado de Colombia. Incluso “enviamos algunos a los obispos y poco a poco se lo vamos enviando a los distintos agentes de evangelización”.
Para ello han programado encuentros virtuales con diversos agentes de pastoral, sacerdotes, diáconos, religiosas, catequistas, docentes, para compartirles este trabajo y, a la vez, implementen en sus espacios.
Alí ha recordado que la primera versión abordó el tema de las rutas de atención, las cuales “llevamos dos años tratando perfeccionar la manera de como atendemos las denuncias, pero también la atención de casos específicos el acompañamiento a las víctimas y a sus familias por eso ya nos lanzamos a esta propuesta”.
Se trata de una atención integral “no sólo abrir una investigación y ya”, sino escuchar a las víctimas plenamente.
Asimismo el obispo ha señalado que “todos estos libros responden al trabajo de campo que hemos llevado a cabo, por eso lo primero que nos dimos cuenta es que no teníamos claro cómo atender a las personas que denunciaban”.
Por eso, en el primero, detectamos tres escenarios : personas que venían a denunciar casos de entornos no eclesiales, situaciones en colegios católicos o fundaciones y la tercera en entornos eclesiales.
Mientras que en el segundo han abordado los lineamientos de prevención y para el segundo semestre de 2022 se tendrá lista la tercera parte, que abordará el acompañamiento psicosocial para las víctimas y sus familias.
En cuanto a los casos de denuncias generadas desde Bogotá, el obispo ha explicado que tienen cuatro casos abiertos, ocurridos en entornos eclesiales en lo que va de pandemia.
Sobre otros casos en Colombia ha señalado que “el padre Jordi Bartomeo ha estado muy interesado en apoyar estas diligencias canónicas, porque la diligencia civil se puso desde el principio”.
Además conoce de cerca el trabajo en jurisdicciones eclesiásticas como Cali, Medellín y Barranquilla, Tunja, las cuales tienen adelantados procesos de formación en protocolos de protección.