“Es lamentable que cuando tenemos que luchar contra la violencia machista haya personas que justifiquen lo injustificable”, ha afirmado Ángel Víctor Torres
El presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, no quiere que las declaraciones de Fernando Báez Santana, el “padre Báez”, acusando a la madre de Anna y Olivia, atribuyéndole la responsabilidad de que su padre las matase por poner fin a su relación, queden impunes. Y es que, tal como recoge Europa Press, el Gobierno canario se suma al Cabildo de Gran Canaria y la Fiscalía Provincial de Las Palmas no solo se unirá en la denuncia contra el sacerdote, sino que ha pedido a la Iglesia que “aparte” al cura.
Y es que, si bien Torres ha agradecido la reacción “tajante” del Obispado de Canarias ante las “indignas” declaraciones de Báez, ha recalcado que considera que por parte de la Iglesia se tienen que poner en marcha aquellos mecanismos que permitan “apartar a quien se sube a un púlpito y usa la palabra para ir en contra de lo que la sociedad está intentando vencer día a día, que no es otra cosa que terminar definitivamente con la violencia machista”.
“Es lamentable que cuando tenemos que luchar contra la violencia machista haya personas que justifiquen lo injustificable”, ha aseverado Torres. “Me abochorna como canario y no nos podemos quedar al margen”, ha añadido, subrayando que “es inaceptable mirar para otro lado ante unas bochornosas, inaceptables, lamentables y denunciables declaraciones del padre Báez”.
Por otro lado, el sindicato UGT Canarias ha exigido al Obispado que actúe “con contundencia” ante las declaraciones realizadas. Así, desde la Oficina Técnica de Igualdad de UGT Canarias han condenado el discurso “rancio y manido” del sacerdote, que ha exigido a la Iglesia que a través de sus órganos internos de gobernanza tome las acciones pertinentes para apartar a Báez de sus funciones.
En un vídeo, Báez afirma que, si el matrimonio se hubiera mantenido unido a pesar de las infidelidades –supuestamente, y según el cura, por parte de la madre–, las niñas continuarían con vida. “Antes el hombre aguantaba a las mujeres aunque se volvieran locas”, afirma, llegando a decir, incluso, que la madre “recoge lo que sembró”. Ante ello, tanto la Fiscalía como el Cabildo se han puesto en marcha para investigar si las declaraciones del sacerdote son constitutivas de delito.
Por su parte, también el obispo de Canarias, José Mazuelos, ha mostrado su “rechazo tajante ante las indignas manifestaciones que en las últimas horas ha expresado el sacerdote Fernando Báez” sobre las pequeñas Anna y Olivia.“Lamentamos profundamente y pedimos perdón por el dolor que estas declaraciones han ocasionado. Rechazamos y desautorizamos dichas opiniones personales que no reflejan los sentimientos de esta comunidad eclesial”, ha afirmado.