El Vaticano pide colaborar con el Óbolo de San Pedro tras sus esfuerzos por transparentar sus cuentas

25/06/2021 | Vida Nueva

El 27 y el 29 de junio, festividad de los santos Pedro y Pablo, las iglesias del mundo destinarán sus ofrendas a la institución

El Óbolo de San Pedro lleva ya unos años trabajando por mostrar con total transparencia sus cuentas y el fin de sus transacciones. Y ahora, como cada año, el 27 y el 29 de junio –festividad de los santos Pedro y Pablo– las iglesias del mundo destinarán sus ofrendas a esta institución, que ahora llama a los fieles a “ayudar al Papa a ayudar”, si bien es posible donar directamente, durante todo el año, a través de la página web del Óbolo.

“En un tiempo de crisis”, recoge Vatican News, “es aún más necesario que todos demos un signo concreto de pertenencia a la Iglesia y de amor al Papa como símbolo de su unidad. Incluso la más pequeña de las ofrendas ayudará a apoyar al Papa Francisco en sus actividades de magisterio, guía de la Iglesia universal y caridad”.

Por su parte, y en un ejercicio de comunicar esa transparencia, el prefecto de la Secretaría para la Economía (SpE), el jesuita Juan Antonio Guerrero Alves, ha explicado en una entrevista a dónde van a parar las donaciones: a acciones caritativas y a la contribución para el servicio del Papa a las iglesias del mundo. “Es importante colaborar porque no podemos pensar que la misión de la Iglesia pueda sostenerse sin la contribución de los fieles. El anuncio del Evangelio en todo el mundo, con todo lo que conlleva, presupone una estructura de apoyo”, ha señalado el jesuita.

Cuentas mermadas

Asimismo, ha desmentido que el Óbolo tenga “800 millones de euros” en sus cuentas. “Al menos en las cuentas que yo he visto, el patrimonio neto de todos los fondos de la Secretaría de Estado en los últimos diez años ha estado siempre muy por debajo de esa cantidad”, ha asegurado. “El fondo del Óbolo en 2015 era de 319 millones de euros, pero en los últimos años viene gastando una media de 19 millones más de lo que recauda. El Fondo Óbolo tenía a 31 de diciembre de 2020 unos 205 millones de euros”.

De esta manera Guerrero ha explicado que el fondo del Óbolo se ha descapitalizado en los últimos años como consecuencia de los gastos de los dicasterios de la curia, que han necesitado más de lo que se recaudaba. “Es obvio que esto no podrá seguir siendo así”, ha matizado.