La décima planta del policlínico Agostino Gemelli de Roma, la destinada a los pacientes de mutuas privadas y la que propicia cierta discreción, ha acogido este domingo por la tarde, 4 de julio, al papa Francisco para ser intervenido quirúrgicamente por un equipo dirigido por el doctor Sergio Alfieri debido a una estenosis diverticular sintomática del colon. Una intervención que, según ha publicado la agencia pública italiana Ansa, obligará al Pontífice a permanecer unos 5 días en el hospital.
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En un comunicado, el Vaticano ha confirmado que la operación se ha realizado al final de la tarde y que el “Santo Padre ha reaccionado bien a la operación realizada con anestesia general y llevada a cabo por el profesor Sergio Alfieri, con la asistencia del profesor Luigi Sofo, el Dr. Antonio Tortorelli y la Dra. Roberta Menghi” en el hospital de la Università Cattolica del Sacro Cuore. La declaración del director de la Oficina de Prensa, Matteo Bruni, detalla que el Pontífice ha contado como anestesistas con: “El profesor Massimo Antonelli, la profesora Liliana Sollazzi y los doctores Roberto De Cicco y Maurizio Soave”; así como la asistencia del “profesor Giovanni Battista Doglietto y el profesor Roberto Bernabei”. Este último, especialista en geriatría y medicina interna, es desde el pasado mes de febrero el médico personal del Papa.
Más allá del parte médico al finalizar la operación, se han ido conociendo algunos detalles de esta intervención quirúrgica con la que el Papa comienza sus vacaciones de julio –por ello este miércoles está suspendida la tradicional audiencia general así como otros compromisos del Pontífice–.
Discreción total
Francisco se desplazó al hospital, situado a unos 7 km. del Vaticano, en un coche sin ningún tipo de distinción, según ha publicado el diario Avvenire. De hecho, la mayor parte del personal apenas se dio cuenta de la llegada del Papa al complejo hospitalario. El Pontífice está en una de las sencillas habitaciones que ya recibieron en varias ocasiones a Juan Pablo II, que fue ingresado en este mismo hospital hasta 11 veces, permaneciendo un total de 160 días.
El Papa ha recibido numerosos mensajes de afecto y cercanía de todo el mundo. El presidente de la República Italiana, Sergio Mattarella, le escribió: “Su Santidad, habiendo aterrizado en París para la visita de Estado que estoy a punto de iniciar en la cercana y amistosa Francia, me he enterado de su hospitalización en el Hospital Gemelli. Los afectuosos pensamientos de todos los italianos, de los que me hago intérprete uniendo los míos, acompañan a Vuestra Santidad en estas horas, junto con los más cordiales deseos de una buena convalecencia y de una aún mejor y pronta recuperación”.
También la diócesis de Roma ha prometido sus oraciones por el Papa y por los médicos que lo atienden; la Conferencia Episcopal Italiana ha deseado al papa Francisco una pronta recuperación. La presidenta del Senado, Maria Elisabetta Alberti Casellati, y la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi, también han publicado buenos deseos, como el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli.
