Bajo el lema ‘Soñemos con una humanidad nueva’, distintos sectores del ámbito social reflexionaron sobre la realidad actual
“Debemos pensar en un cambio de rumbo que nos conduzca a una nueva humanidad. Se impone un cambio cultural para vivir la cultura del servicio. Debemos reconstruir nuestra amistad social”, expresó en la apertura de la Semana Social 2021, el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, Oscar Ojea.
El obispo de San Isidro manifestó su preocupación por la desigualdad, tanto en la distribución de las vacunas, como en la imposibilidad de accesos a servicios básicos. “La pobreza más desgarradora, convive con la riqueza más inconcebible”, aseveró.
Durante esta primera jornada, Ojea señaló que la fibra de un pueblo se manifiesta en su respuesta al sufrimiento. Cree que se necesita un jubileo para “reparar vínculos, reconstruir la trama social”.
En alusión al lema del encuentro, aregó que se puede comenzar a dar los primeros pasos soñando con una humanidad nueva.
El obispo de Lomas de Zamora y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, Jorge Lugones, señaló que la pandemia golpeó fuertemente a todos, pero fue más virulenta con la población más vulnerable.
Resaltó que la ayuda oficial recibida no resultó suficiente, y recordó las palabras del papa Francisco que aseguró que esta situación puso al desnudo la enorme cantidad de inequidades y desigualdades.
El obispo sostuvo que “es una urgencia social encontrar caminos para encontrar una alimentación accesible para todos“, temática de esta jornada de apertura.
Se refirió también a los temas que se analizarán durante estos días:
Finalmente, Lugones pidió diálogo ante las diferencias políticas. Con el objetivo de “construir una fraternidad para salir mejores”, exhortó a realizar esfuerzos para deponer en nuestra sociedad odios, mentiras y noticias falsas, acusaciones y distanciamientos ideológicos que impiden el debate.