Este viernes, 16 de julio, se ha celebrado durante dos horas la última sesión de juicio por los presuntos abusos entre menores en el preseminario San Pío X del Vaticano. Mientras se espera la sentencia, anunciada para el 6 de octubre, el presidente del tribunal, Giuseppe Pignatone, ha agradecido “todas las contribuciones” durante el proceso. En la sala habilitada en los museos vaticanos estaban los acusados, los sacerdotes Gabriele Martinelli y el rector de entonces Enrico Radice.
- ?️ El Podcast de Vida Nueva: Tokio 2021: Juegos Olímpicos ‘Fratelli Tutti’
- ¿Quieres recibir gratis por WhatsApp las mejores noticias de Vida Nueva? Pincha aquí
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
Defensa de los acusados
En esta última se sesión ha intervenido la abogada de Marinelli, Rita Claudia Baffioni, y la de la Opera Don Folci –encargada de la gestión del centro que provee de monaguillos a San Pedro–, Emanuela Bellardini. Baffioni ha pedido la absolución del acusado cuestionando que el procedimiento no es correcto al tratarse de abuso entre dos menores –y se están aplicando leyes de abuso de un adulto a un menor–, así como por otras consideraciones. También pidió que se rechazaran todas las reclamaciones de daños y perjuicios del demandante civil, algo a lo que se sumó Bellardini.
También denunciaron contradicciones en el testimonio de la víctima, L.G., en una carta que envió en su día al obispo de cómo y en el testimonio de unas agresiones en algunas salas comunes y en los dormitorios. Según la abogada, Martinelli no tenía ese gran papel de responsabilidad descrito por muchos, y nunca se expulsó a nadie por su culpa. Además han señalado que nunca se grabaron o tomaron imágenes con los móviles, por ejemplo. “No hay ninguna prueba de la conducta atribuida a Martinelli, ninguna prueba de que el hecho haya ocurrido realmente”, ratificó haciendo mención a los testimonios de los testigos.
Especialmente, los abogados cargan contra el exalumno polaco Kamil Jarzembowski –el que sería el único testigo de un episodio de abusos– como autor de esta estrategia y que demandó en su día a la Opera Don Folci. “Kamil escribió un guión destinado a describir un clima negativo, pero ¿por qué en 2014, tras ser expulsado, pide volver? Ha sido testigo de dramas, pero quiere quedarse” señaló la abogada de la institución. También se rechaza todo encubrimiento por parte del rector.