“El futuro del mundo reside en esta alianza entre jóvenes visionarios y mayores soñadores”, han expresado los prelados
Este 25 de julio la Iglesia universal celebra la primera Jornada Mundial de los Abuelos y las Personas Mayores, instituida por el Papa Francisco. Los obispos colombianos han resumido en tres palabras su mensaje: sueños, memoria y oración.
“Recordar que ellos son necesarios para construir en fraternidad y amistad social el mundo del mañana”, añadió Francisco Antonio Ceballos Escobar, presidente de la Comisión Episcopal de Promoción y Defensa de la Vida.
El prelado les ha animado “a no dejar de soñar, advirtiéndoles que sus sueños serán tomados por los jóvenes y estos a su vez los llevarán adelante, esto al referirse al texto del profeta Joel ‘Sus ancianos tendrán sueños, y sus jóvenes, visiones’”..
“Sí, el futuro del mundo reside en esta alianza entre jóvenes visionarios y mayores soñadores. Los jóvenes están llamados abrir nuevas puertas y los ancianos tienen las llaves, es que no hay futuro sin este encuentro entre los ancianos y los jóvenes”, aseguró.
En tanto ha señalado que “la memoria es vivir, esta memoria puede ayudar a construir un mundo más humano más acogedor”.
Sobre la oración, Ceballos destaca que “la oración de los ancianos puede proteger al mundo. Sí, querido abuelo, querida abuela tu oración es un recurso muy valioso, es un pulmón del que la Iglesia y el mundo no puede privarse”.
De hecho “el papa Francisco en su mensaje hace referencia al sufrimiento por la soledad que pueden estar pasando los abuelos y las personas mayores, en estos tiempos de pandemia”.
“El Señor sigue enviando ángeles para consolar a quienes se sienten excluidos, descartados, abandonados, solos, enfermos”, ha dicho.
Por tanto “ancianos, su promesa permanece y se hace realidad en sus hijos y nietos como también en las instituciones del Estado, pues es nuestra la responsabilidad de atender a los mayores”.
Finalmente, el obispo pidió una oración especial por los abuelos y personas mayores e invitó a los hijos y nietos a acompañarlos, protegerlos y estar presentes siempre en sus vidas.
Foto: Vatican News