Han señalado que “no es tiempo para la indiferencia es el momento para levantar la voz y exigir el respeto por la vida”
La situación de violencia en Buenaventura, emporio portuario del Valle del Cauca, ha llevado a los obispos de la región del pacífico y del suroccidente colombiano a solidarizarse con Rubén Jaramillo, titular de esta jurisdicción eclesial.
En un comunicado, los prelados han asegurado que “no es tiempo para la indiferencia; es el momento para levantar la voz y exigir el respeto a la dignidad de la vida humana”.
“Animamos a nuestras comunidades a acompañar desde la oración, las jornadas de la paz convocadas en la hermana Iglesia diocesana de Buenaventura”, acotaron.
Además han instado a los actores del conflicto “a cambiar las armas y el odio por herramientas que forjen la sana convivencia y el respeto de todos los ciudadanos”.
De igual modo han exigido “a las autoridades locales, regionales y nacionales, garantizar la seguridad de los bonaverenses. Que no les falten oportunidades de educación y trabajo que les permita hacer realidad sus proyectos de vida”.
“A la Santísima Virgen María, Estrella del Mar, pedimos su maternal intercesión por el hermano pueblo de Buenaventura”, finalizaron.
Foto: CEC