Cono Sur

Argentina: máxima sanción canónica para el religioso Rosa Torino

  • La justicia penal ya lo había condenado a 12 años de prisión efectiva
  • Ahora, la Iglesia lo encontró culpable y decretó la pérdida del estado clerical





El Arzobispado de Salta comunicó la máxima pena canónica con la pérdida del estado clerical para el religioso Agustín Rosa Torino, dj. El mes pasado, la justicia penal ya lo había condenado a 12 años de prisión por tres casos de abuso sexual.



Según el comunicado, el padre fue encontrado culpable de los cargos que se lo acusaba en el foro eclesiástico. Por tal motivo, José Luis Mollaghan, delegado de la Congregación para la Doctrina de la Fe, decretó “la pena máxima de la pérdida del estado clerical”.

Asimismo, agregaron que este decreto puede ser apelado en los términos establecidos por el derecho.

Agustín Rosa Torino

El sacerdote Rosa Torino fundó, en la provincia de Salta en 1986, el Instituto Religioso de Derecho diocesano Hermanos Discípulos de Jesús de San Juan Bautista, con sede también en distintos puntos del país y en México, España y Chile.

Hacia fines del 2015 un exnovicio lo denunció penalmente por abuso sexual, y desde allí, otros miembros de la congregación se sumaron a las denuncias.

En el 2019, después de la consideración de las investigaciones y de los informes solicitados, la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, dispuso la supresión del Instituto religioso.

El 8 de julio próximo pasado fue condenado por la justicia penal a 12 años de prisión efectiva por dos delitos de abuso sexual gravemente ultrajante por la duración agravado por ser ministro de culto reconocido, y por abuso sexual simple agravado por ser el autor ministro de culto reconocido.

Situación del padre Aguilera Tassín

El Arzobispado de Salta también se refirió al juicio penal contra el presbítero José Carlos Aguilera Tassin. Este sacerdote había sido condenado por la justicia canónica por seis denuncias de abuso sexual a menores de edad, en octubre de 2020. Se le aplicó la pena máxima y se redujo su estado clerical.

Esta decisión fue apelada por el sacerdote. Ahora, en el comunicado de la Iglesia salteña se informa que la Congregación para la Doctrina de la Fe aceptó trasladar la realización de la apelación, “y le ha encargado al Tribunal Eclesiástico Bonaerense que lleve adelante dicho proceso penal de juzgarlo en segunda instancia“.

Compartir
Noticias relacionadas










El Podcast de Vida Nueva