“Todos llamados a la fraternidad”, es el lema elegido para la peregrinación nacional al Santuario de Lourdes. Una cita que, desde el 11 al 16 de agosto, concentrará a miles de fieles del país galo y que llega a su edición número 148. En esta ocasión, la peregrinación –tras la edición virtual del año pasado– estará presidida por el arzobispo de París, Michel Aupetit.
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Vivir la fraternidad con los enfermos
Para el sacerdote asuncionista Vincent Cabanac, director de la peregrinación, “esta peregrinación está diseñada para que los participantes experimenten un fuerte momento espiritual y humano. Todos son bienvenidos y pueden compartir la fraternidad que nos une”. El programa ofrece conferencias, mesas redondas, formación específica para los voluntarios que atienden a enfermos así como otras propuestas culturales. También se ofrecerán testimonios sobre la experiencia de fe durante la pandemia.
Para recuperar este evento y permitir la participación de enfermos, en santuario ha reorganizado completamente todas sus instalaciones de acogida para que sean lugares más seguros para los vulnerables. En esta edición hay 3.000 peregrinos inscritos, visitarán la gruta unas 300 personas enfermas gracias al trabajo de 1.500 hospitaleros voluntarios. También participan unos 400 jóvenes menores de 18 años y 120 cristianos orientales en su propia peregrinación.
