La sorpresiva renuncia del obispo de Solsona, Xavier Novell, que tuvo lugar el pasado lunes ha tenido como respuesta un silencio eclesial y público más allá de las preguntas sobre el motivo de esta dimisión aceptada por el Papa Francisco.
Son pocas las voces del ámbito social que han dado un paso al frente para glosar la figura del pastor de 52 años. Entre ellas, los dos ex consejeros condenados por el procés, Josep Rull y Jordi Turull. Ambos han agradecido públicamente a través de redes sociales el apoyo y respaldo prestado en estos años por el prelado. En concreto, los dos destacan cómo el obispo acudió a visitarles a la prisión de Lledoners, a pesar de no pertenecer a su diócesis.
Además de significarse con la causa independentista, Novell respaldó activamente el referéndum ilegal del 1 de octubre. De la misma manera, se mostró en contra de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, así como del encarcelamiento de los políticos implicados en el evento.
A través de un tuit, Rull ha elogiado cómo “el obispo Novell siempre ha estado al lado de los presos políticos, con palabras y, sobre todo, con hechos, siendo una de las pocas excepciones en la jerarquía de la Iglesia Catalana”. “Solo puedo tener palabras de gratitud, aunque discrepe en temas muy relevantes”, apostilla Rull a continuación en su mensaje.
En esta misma línea, Turull aplaude la labor pastoral del prelado en Twitter: “Personalmente siempre le estaré muy agradecido por el calor humano en sus visitas a la prisión de Lledoners, pese a que no está en su diócesis, y no siempre con el agrado de todo el mundo”.
Aunque hay voces que ven en este respaldo sin fisuras a la autodeterminación una de las posibles causas de su cese, en el comunicado oficial se subraya que los motivos que le han llevado a presentar la renuncia son “estrictamente personales”.