El obispo Eyalía Ambrósios, de la Iglesia ortodoxa griega, ha desatado la polémica al rociar con agua bendita a los feligreses, durante una misa, alegando que esta era “la medicina para cada enfermedad, la medicina contra el coronavirus”.
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Tal como relata Begoña Castiella, corresponsal en Atenas para ABC, el obispo emérito de Kalávrita, jubilado en 2019, participaba el pasado domingo en la liturgia de la iglesia de San Juan en Riólo (Ajaía, una provincia del Peloponeso). Después de la homilía del párroco, Ambrósios habló sobre San Juan y, sacándose un spray de un bolsillo, roció a los fieles.
Escupir a los homosexuales
Este momento ha sido solo una más de las polémicas causadas por este prelado, famoso en Grecia por sus declaraciones, sobre todo, en contra de la comunidad LGBTI y su cercanía al partido Amanecer Dorado, afirmando, incluso, que los inmigrantes “contaminan el país”.
En cuanto a su postura en contra de la comunidad LGBTI, Ambrósios llegó a ser incluso condenado por la Justicia griega por incitación al odio, ejercida desde su posición de poder y exposición pública. De hecho, el prelado animaba a “escupir” a los homosexuales, a quienes considera “monstruos”, mental y físicamente “enfermos”.