Mientras en Italia se difunden algunos rumores (interesados) sobre la baja forma del papa Francisco tras su operación de colon, la agenda internacional de viajes del pontífice no deja de llenarse. Al casi inminente viaje a Hungría y Eslovaquia, la participación en la cumbre del clima, la posible peregrinación a Santiago de Compostela o la clausura del Congreso Eucarístico Italiano en el sur del país transalpino el 25 de septiembre de 2022… los chipriotas dan por cerrado una escala en la isla.
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En los dos días de duración del viaje apostólico, el pontífice saludaría a las autoridades civiles y religiosas de la isla, celebraría la eucaristía en un espacio al aire libre –como el estadio GSP de Nicosia, según asegura la prensa local– y se incluiría algún acto con algún colectivo significativo. En cualquier caso, el programa está en elaboración, según fuentes eclesiales.
Un momento de división
Según los medios de Chipre, la visita del papa Francisco a la isla estaría cerrada –a falta de algunos detalles concretos del programa– para los días 2 y 3 de diciembre de este 2021. Un país que Benedicto XVI visitó en 2010 y que es considerado un puente entre Europa y Oriente Medio.
La llegada de Bergoglio se produciría en un momento delicado para la isla que no sólo vive las consecuencias sanitarias y sociales de la pandemia por el coronavirus; sino que se encuentra en un momento de división política a la espera de las conversaciones de paz avancen de forma significativa. El propio presidente del país, Nicos Anastasiades, llegó a anunciar una visita papal en noviembre de 2019 que se habría producido a lo largo de 2020, año en el que el país celebraba el 60º aniversario de la creación de su República. La pandemia hizo imposible el viaje.
