La madre superiora del monasterio de Montegalda (Vicenza, norte de Italia), Angela Brugnaro (77 años), ha sido ‘denunciada’ a la diócesis por su hermano médico, que ha revelado que ella y las otras cinco monjas que viven en el lugar no están vacunadas y se oponen a la inmunización, según informa EFE.
El doctor, jubilado de 72 años, trabajó durante años como médico de atención primaria en la zona y ha sido vacunador voluntario del sistema sanitario, por lo que se muestra indignado por la actitud de su hermana.
“A pesar del llamamiento a la vacuna del Papa, de los obispos y del presidente italiano, Sergio Mattarella… tenéis un nido de antivacunas (…) con la superiora que vive de la propaganda diaria y tonta antivacunas. El colmo es que es mi hermana”, escribe el doctor Primo Brugnaro, en una carta dirigida al obispo y que revelaba ayer el diario local Il Gazzattino.
“Lleva un año así. Me molesta su posición. Mi hermana recibe mensajes antivacunas e inmediatamente los reenvía. Si no quiere vacunarse, que se guarde sus ideas para sí misma. Pero las reglas deben ser respetadas”, dice, relatando que en la misa dominical en el monasterio no se cumple la obligación de llevar mascarilla.
En su respuesta, la diócesis ha destacado que el propio obispo “en varias ocasiones se ha expresado por esta elección responsable hacia sí mismos y hacia los demás” y se ha “informado periódicamente a los párrocos y a las realidades religiosas de la necesidad de atenerse a las indicaciones del Gobierno sobre las normas y comportamientos a adoptar, como distanciamientos, uso de mascarillas…”.
“Admito que no estoy vacunada”, dice la madre superiora que asegura que lo hará “en septiembre” y que no ha recibido ninguna comunicación del obispo, según afirma el mismo diario al ponerse en contacto con el monasterio. “En septiembre creo que lo haré. He querido esperar hasta el verano porque no hay mucho peligro en verano. Pero si esta enfermedad vuelve a empezar y se cobra tantas víctimas… entonces voy”, añade la religiosa.