Francisco dispuso en 2015 que la instalación vaticana pudiera ser utilizada con motivos sanitarios
Han pasado seis años desde que en julio de 2015 el papa Francisco autorizase el uso del helipuerto vaticano para las urgencias pediátricas del cercano hospital Bambino Gesù –también de titularidad pontificia–. El balance no puede ser más positivo ya que ha facilitado la realización de 500 operaciones pediátricas, 65 solo desde el pasado mes de enero.
La instalación de los Jardines Vaticanos tiene autorización para el aterrizaje y despegue, tanto de día como de noche, de helicópteros de emergencia para la gestión de urgencias y todo lo referido al traslado de órganos de donantes. El uso del helipuerto ha acelerado también el transporte de niños y jóvenes en condiciones críticas.
Para esto están coordinados el servicio de emergencias italiano, las urgencias del hospital, la gendarmería vaticana y los bomberos de la Santa Sede, responsables de las maniobras del helipuerto. La práctica, publica el Corriere della Sera hace que un paciente pueda ser trasladado en 6 o 7 minutos. Bebés prematuros, niños con lesiones en la columna vertebral o en la cabeza, pacientes que han tenido un intento de suicidio… han empleado el helipuerto desde que el 29 de diciembre de 2015 llegó el primer paciente por este medio… así hasta 491 casos.