La grave situación del conflicto armado en Istmina- Tadó, en el departamento del Chocó, en Colombia, ha encendido las alarmas de Mario Álvarez, obispo de esta jurisdicción, quien ha denunciado que miles de personas del Medio San Juan han tenido que escapar por la violencia.
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El prelado ha pedido a los grupos armados –Autodefensas Gaitanistas y el ELN– actuar bajo el derecho internacional humanitario y evitar “involucrar a la población civil en situaciones en las que se ponga en riesgo la vida de las personas”.
“Seguimos apostándole al Pacto por la vida y por la paz, y al acuerdo humanitario ya, para nuestras comunidades del Chocó. Todos los que, con amor y sacrificio, trabajan por la paz según los dictámenes del Evangelio y las orientaciones de la Iglesia”, señaló.
Cercanía del arzobispo de Bogotá
Luis José Rueda, arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia de Obispos de Colombia, ha expresado su apoyo a Álvarez: “Al conocer este clamor del obispo de Istmina envió un saludo de solidaridad para con esta Iglesia particular y sus comunidades”.
Además ha indicado que “su mensaje lleva y trae un gran clamor por la vida, por el Acuerdo Humanitario, por la reconciliación, por la paz. Se plasma en esa cata suya, de sucesor de los apóstoles, el sufrimiento como pastor, que recoge la aflicción de un pueblo azotado por los grupos armados al margen de la ley”.
“Ánimo hermanito estamos con usted y su comunidad”, destacó el primado de Colombia, mientras que hace votos para que “el Señor conceda la única y verdadera paz, que es la paz del reino de Dios, la paz del Hijo y de Dios Padre”.
Foto: 360 Radio
