La convocatoria para esta Misa es por una sociedad sin esclavos ni excluidos
En el marco de la Jornada Mundial del Migrante y Refugiado se realizará la 14º Misa en Solidaridad con todos los Excluidos y las Víctimas de Tráfico y Trata de Personas. Será en la Plaza Constitución de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a las 17.
Son varias las organizaciones que convocan y adhieren a este ya tradicional gesto en favor de los hermanos víctimas de estos delitos que atentan contra la dignidad humana: el equipo de sacerdotes para las villas de emergencia; las Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor; Puerta Abierta Recreando; la Red Kawsay; el Departamento de Migraciones del Arzobispado de Buenos Aires; el equipo de No a la Trata de la Comisión Nacional de Justicia y Paz; Fundación La Alameda; la Comisión Episcopal de Migrantes e Itinerantes de la CEA, entre otros.
Presidirá la misa, Gustavo Carrara, obispo auxiliar de Buenos Aires y Vicario Episcopal para la Pastoral en Villas de Emergencia y concelebrarán el P. Lorenzo “Toto” de Vedia y los sacerdotes que se acerquen a la celebración.
Desde hace 13 años se convoca esta misa con la finalidad de solidarizarse y visualizar la situación que viven muchos sectores vulnerables: las víctimas de la trata de personas, los trabajadores cartoneros, mujeres en situación de prostitución, personas en situación de calle, víctimas de trata y tráfico, laboral y sexual, migrantes e itinerantes, personas con adicciones.
Esta iniciativa pastoral surgió con el entonces arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, Jorge Mario Bergoglio, junto a un grupo de sacerdotes. Allí, el ahora papa Francisco comenzó a hablar de la “cultura del descarte” para definir un estilo de vida que evalúa, de acuerdo a su utilidad, quienes sirven o no en la sociedad.