Ha fallecido el cardenal Jorge Urosa Savino, arzobispo emérito de Caracas, tras batallar durante varios días contra complicaciones, asociadas con el Covid-19. Sería el segundo purpurado del continente en morir por esta enfermedad, luego de Eusebio Oscar Scheid, arzobispo emérito de Río de Janeiro.
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La noticia fue confirmada por la arquidiócesis de Caracas y el cardenal Baltazar Porras, administrador apostólico de esta misma jurisdicción venezolana, la tarde del martes 23 de septiembre.
10 días antes, el 13 de septiembre, tras ser ingresado nuevamente a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), el cardenal Urosa escribió una carta de despedida y, luego, recibió la extremaunción.
En la misiva, expresó su amor por el pueblo venezolano, hizo votos por la pronta libertad del país, reiteró su comunión con los obispos, llamándolos a la unidad, y expresó su fidelidad al pontificado de Francisco.
Trayectoria del cardenal
Urosa nació en Caracas el 28 de agosto de 1942. Estudió filosofía en el seminario Santa Rosa de Lima de Caracas y teología en el seminario San Agustín en Toronto (Canadá). En 1967 fue ordenado sacerdote.
Se doctoró en Teología dogmática en 1971 en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma y fue presidente de la Organización de Seminarios Latinoamericanos.
Ejerció como rector y profesor en el Seminario San José en Caracas y rector del seminario Interdiocesano de Caracas y vicario general de la Arquidiócesis de Caracas.
Fue en 1982 cuando el entonces papa Juan Pablo II lo nombra obispo auxiliar de Caracas y titular de la dioecesis Vegeselitana in Byzacena. En 1990 se convierte en arzobispo de Valencia para luego en 2005 ocupar el puesto de arzobispo de Caracas.
En 2006, el ahora papa emérito Benedicto XVI le confiere la dignidad de cardenal, convirtiéndose en el quinto purpurado venezolano y ferviente defensor de la causa democrática en la era del fallecido Hugo Chávez.
Foto: Arquidiócesis de Caracas
