La comisión encargada de la investigación comenzó a trabajar en 2018, dando lugar a un documento de más de 2.500 páginas
Han sido un total de “entre 2.900 y 3.200 pederastas” los que, en el seno de la Iglesia católica francesa, han abusado de menores desde 1950. Así lo constata la comisión encargada de investigar el abuso sexual en la institución y que mañana, tras varios años de trabajo, hará público su informe, el cual ya se ha adelantado que cuenta con más de 2.500 páginas.
La comisión, al frente de la cual se encuentra Jean-Marc Sauvé, lleva cocinando este informe de gran envergadura sobre los abusos en la Iglesia francesa desde 2018, cuando religiosos y obispos llegaron a un acuerdo para esclarecer la verdad de lo ocurrido en las últimas décadas. Ese mismo año, el episcopado galo aprobaba en su Asamblea Plenaria de otoño, “por una mayoría abrumadora”, crear una comisión independiente con el fin de arrojar luz sobre la lacra de los abusos sexuales a menores tras el histórico encuentro esos días con ocho víctimas que relataron su experiencia.
Se estima que la cifra ronda los 10.000 niños y niñas abusados. Y es que han sido 6.500 los testimonios recogidos hasta el momento, a quienes se suman los que han pedido no hablar y quienes ya han fallecido. Asimismo, la comisión ha realizado el trabajo de campo en un tercio de las diócesis francesas, donde los obispos residentes les han permitido revisar los archivos.
Por otro lado, y con el objetivo de ser lo más pulcro posibles con los datos, la comisión solicitaba, para elaborar su informe, al Instituto Nacional de Salud e Investigaciones Médicas que investigue el número de casos de abuso sexual sin estratificar por lugar donde se han cometido, es decir, si había sucedido en el ámbito familiar, escolar o eclesial, entre otros.