El Ministerio de Educación contempla reducir la asignatura de Religión a una hora lectiva semanal al menos en la etapa de Educación Primaria. Así se contempla en el proyecto de real decreto al que ha tenido accedo Vida Nueva, un documento que el equipo de Pilar Alegría ha hecho llegar hoy a las comunidades autónomas.
Si en el primer borrador de verano que aterrizaba la aplicación de la LOMLOE -conocida como Ley Celaá- no se detallaba carga lectiva para alguna materia, ahora sí se habla de una reducción del tiempo de la asignatura de Religión y de más horas para Lengua y Literatura, Matemáticas, Conocimiento del Medio o Educación Artística.
De esta manera, Religión se impartiría en 210 horas en toda Primaria, quedando en 70 horas por ciclo. En total, son 90 horas menos frente a la LOE socialista de Rodríguez Zapatero y sin comparación con la LOMCE, puesto que dejaba en manos de las autonomías la carga lectiva.
Eso sí, los Ejecutivos autonómicos tienen margen de maniobra para aumentar las horas de clase. En el caso de la Comunidad de Madrid, por ejemplo, ya han mostrado su intención de mantener la carga lectiva como hasta ahora. Pero de igual manera, permite que se ajusten a lo mínimo exigido, como ya ha manifestado, por ejemplo, La Rioja, que reducirá la materia “al mínimo legal”.
A la espera de una reacción por parte de la Conferencia Episcopal, desde Escuelas Católicas ya han mostrado su disconformidad con esta propuesta de Moncloa. Para Luis Centeno, secretario general adjunto de la entidad que aglutina a la mayoría de los centros cristianos de nuestro país, esta iniciativa es una “grave reducción” que va “en sentido contrario al objetivo principal de la educación, que es el pleno desarrollo de la persona, tal y como indica el Art. 27.2 de la Constitución”.
Aun sabiendo que los gobiernos regionales pueden complementar el horario, Centeno considera que “esta reducción estatal supone una clara postura del actual Gobierno respecto a esta materia”.