El arzobispo de Toledo “lamenta profundamente” y “desaprueba” el videoclip de C. Tangana

El arzobispo de Toledo “lamenta profundamente” y “desaprueba” el videoclip de C. Tangana

“El Señor arzobispo desconocía absolutamente la existencia de este proyecto, el contenido del mismo y el resultado final”, ha señalado la diócesis de Toledo tras la publicación del último videoclip del rapero C. Tangana y la cantante argentina Nathy Peluso. Un tema, “Ateo”, que se presenta a través de un vídeo grabado principalmente en la catedral de la archidiócesis primada. Una bachata en la que el madrileño cosas como “Este amor es como una religión”, Yo era atеo, pero ahora creo porque un milagro bajó del cielo o “Quiero hacerle religión a tu melena, a tu boca y a tu cara, y que me perdone la Virgen de la Almudena las cosa’ que hago en tu cama”,



Revisión de procedimiento

Una vez que ha visto la luz el tema, a través de un comunicado, la archidiócesis ha señalado que, el primado, Francisco Cerro “lamenta profundamente estos hechos y desaprueba las imágenes grabadas” en la catedral. Ante las reacciones, desde el Obispado se pide “humilde y sinceramente perdón a todos los fieles laicos, consagrados y sacerdotes, que se han sentido justamente heridos por este uso indebido de un lugar sagrado”.

Una vez que se ha desatado la polémica, desde la diócesis impulsarán el compromiso de “revisar el procedimientoseguido para evitar que vuelva a suceder algo semejante”. “Para ello, se comienza a elaborar inmediatamente unprotocolo para la grabación de imágenes de difusión pública en cualquier templo de la archidiócesis”, asegura el comunicado.

Por su parte, el deán del cabildo, Juan Miguel Ferrer Grenesche, señaló que la canción narra la “historia de una conversión mediante el amor humano. La letra de la canción es precisa: Yo era ateo, pero ahora creo, porque un milagro como tú ha tenido que bajar del cielo”. Además, añadió en un comunicado, el tema “a ciertas actitudes de intolerancia contrapone la comprensión y acogida de la Iglesia, tal y como se manifiesta en las secuencias finales del video”. Para el deán “es cierto que el video utiliza un lenguaje visual provocador, pero no afecta a la fe”.

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