Los premios Alter Christus 2021 reconocen la labor de los sacerdotes durante la pandemia

El trabajo pastoral en las redes sociales, la formación de seminaristas y la entrega en algunas periferias, los perfiles galardonados en la octava edición de esta propuesta del Regnum Christi

Los premios Alter Christus 2021 reconocen la labor de los sacerdotes durante la pandemia

Este lunes 18 de octubre, la Universidad Francisco de Vitoria ha acogida la entrega de la VIII edición de los premios Alter Christus, con las que Regnum Christi reconoce “la entrega y contribución de los sacerdotes a las personas y a la sociedad”. En esta ocasión has sido premiados Lorenzo Trujillo, por su dedicación durante más de 30 años al seminario de la diócesis de Ciudad Real; Jorge de Dompablo, por su dedicación pastoral en las periferias de los tóxico dependientes e inmigrantes en Madrid; Julio Segurado, por su atención a las familias en su parroquia de San Pedro Poveda, en Jaén; Joaquín Hernández, párroco de San Clemente Romano, en Madrid, por su tarea pastoral en las redes sociales; además de Benito Rodríguez, capellán del hospital Alvaro Cunqueiro, de Vigo, en reconocimiento al servicio de los sacerdotes durante la pandemia.



Hacer presente a Cristo

Trujillo dedicó el reconocimiento a “todos aquellos que actualmente conducen los seminarios y llevan a cabo la formación y el discernimiento”. “Los sacerdotes jóvenes van a afrontar el hundimiento de la cristiandad y la emergencia del cristianismo”, destacó. Segurado defendió que “la parroquia es una familia de familias, algo sagrado y es el rostro de Dios”. “En la Iglesia hablamos de parroquia, que es vinculación y relaciones, y creamos un entramado de relaciones humanas y de relaciones de fe”, añadió.

Joaquín Hernandez más conocido como @joaquinconp en Instagram, y por su podcast “Al lío”, en Spotify, destacó que “Dios se ha servido de una cuenta de Instagram, que podría parecer todo lo contrario, para entrar dentro de un corazón”. Jorge de Dompablo señaló que “acoger al inmigrante es “la alegría más grande que puede haber: damos testimonio de Jesucristo y lo vemos caminar a nuestro lado. Vemos el evangelio hecho realidad”. “Nuestra misión es hacer presente a Cristo y descubrirle en las personas, en los demás”, añadió. Rodríguez recordó “a los capellanes fallecidos por amor y en acto de servicio. Han hecho lo que tenían que hacer pues el que inició en nosotros esta obra buena Él mismo la llevará a término. Han ofrecido y devuelto a Dios la vida que Él mismo nos ha dado antes para que la entreguemos”.

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