El profesor del Instituto Superior de Pastoral, Juan Pablo García Maestro, considera que ‘Fratelli tutti’ es un instrumento clave para promover “el diálogo con el mundo, con las demás religiones y en materia de ecumenismo”. La ponencia del trinitario vallisoletano cerró las V Conversaciones PPC que se han celebrado hoy en el Colegio Mayor Berrospe de Madrid.
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Centrándose en las referencias al diálogo interreligioso que vertebran la encíclica, elogió a Francisco, en tanto que, “sin estar en el Concilio Vaticano II, ha sido capaz de hacer una síntesis original desde la opción por los pobres”, una apuesta que se convierte en un elemento esencial de unión entre las diferentes confesiones. De esta manera, presentó a Jorge Mario Bergoglio como “el hombre de todas las religiones”, a la vez que rechaza “todo sincretismo conciliador”.
Salto de madurez
Convencido de que “no habrá paz en el mundo, si no hay paz en las religiones”, García Maestro apreció la condena firme del Papa de toda forma de violencia que utiliza al hecho religioso como argumento. En esta misma línea, valoró el paso de reconocer el llamado “ecumenismo de la sangre”, que consideró “el nivel más maduro del ecumenismo”.
Durante su exposición, García Maestro defendió también que “no se conoce ningún texto de los padres de la Iglesia de los cuatro primeros siglos que aplique el axioma de que fuera de la Iglesia no hay salvación”
Con todo esto, para que ‘Fratelli tutti’ no caiga “en vía muerta”, urgió a incentivar una “teología pastoral” que la desarolle a partir de los que considera “la mayor aportación del cristianismo a lo largo de la historia, que ha sido la fraternidad”.