El gobernador Zamora destacó que se trata de un “un espacio de encuentros en una tierra de encuentros”, donde las cinco principales religiones están magnificadas y lo convierten en un lugar único en el mundo
“Este lugar significa la posibilidad que nuestros niños, jóvenes y todos los que nos puedan visitar sepan que en este pedacito de tierra, hay un parque del encuentro y que significa la diversidad. Y la convivencia de todos y bajo un objetivo central: que podamos vivir, progresar y crecer en paz“. Estas palabras fueron expresadas por el gobernador de Santiago del Estero al inaugurar el Parque del Encuentro.
El gobernador Gerardo Zamora y la intendenta de la capital provincial, Norma Fuentes, abrieron este espacio cultural de formación y recreación, un lugar ecuménico de diálogo interreligioso, del que participaron no sólo autoridades provinciales y de los municipios, sino también miembros de las distintas confesiones (judías, evangélicos, judías, católicas y musulmanas).
En el acto estuvieron presentes los representantes de cada una de ellas: el pastor Jorge Gómez director ejecutivo de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera); Omar Abboud, responsable del Instituto del Diálogo Interreligioso (IDI) y miembro del Centro Islámico; Alberto Zimerman, secretario de Relaciones Interconfesionales de la DAIA; Lama Rinchen Kandro, directora de la Asociación de Budismo Tibetano Kagyu Tekchen Chöling de la Argentina, y el obispo de Santiago del Estero, Vicente Bokalic.
En el antiguo predio del zoológico, en el Parque Aguirre, se levantaron cinco edificios: una sinagoga, una mezquita, un templo budista, otro protestante y la capilla Sixtina, como símbolo de la convivencia fraterna y universal entre las las distintas religiones.
El papa Francisco se hizo presente, enviando una carta en la que expresa su alegría por esta iniciativa. “La noticia de este emprendimiento me alegró”. Sostuvo que “En una época de tantos desencuentros, que una comunidad tenga el coraje de realizar una cosa así, supone coraje, valentía y sobre todo ganas de caminar juntos“.
“En medio de esta ‘Tercera Guerra Mundial en pedacitos y en etapas’ que vive la humanidad”, el Pontífice destacó que estos pequeños pasos hacia el encuentro entre las personas son creadores de paz y armonía.
Asimismo, Los felicitó por el emprendimiento, les aseguró rezar por ellos y les pidió que lo hagan por él.