El Vaticano ha decidido ampliar la fase diocesana del Sínodo. Y es que, tal como ha explicado la Santa Sede en un comunicado, “las numerosas comunicaciones que hemos recibido en estas primeras semanas del proceso sinodal por parte de las Conferencias Episcopales, de las diócesis y de las eparquías son una verdadera confirmación alentadora de quienes en la Iglesia están comprometidos con la celebración de la primera fase del proceso sinodal, constituida por la consulta al Pueblo de Dios”.
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“Por todo ello estamos realmente agradecidos”, continúa el Vaticano, señalando, asimismo, que durante este período “hemos escuchado, una y otra vez y desde diversas instancias, la petición de prolongar la duración de la primera fase del proceso sinodal para dar una mayor oportunidad al pueblo de Dios de tener una auténtica experiencia de escucha y diálogo”.
Una Iglesia que escucha
Conscientes de que “una Iglesia sinodal es una Iglesia que escucha” y considerando que “esta primera fase es esencial para este camino sinodal y evaluando estas peticiones”, el Consejo Ordinario del Sínodo de los Obispos ha decidido ampliar hasta el 15 de agosto de 2022 el plazo para la presentación de los resúmenes de las consultas por parte de las Conferencias Episcopales, las Iglesias Orientales Católicas sui iuris y los demás organismos eclesiales. En un primer momento, este plazo se marcó hasta marzo de 2022. Por tanto, habrá cinco meses más de tiempo para trabajar en las diócesis.
