¿Le ha declarado el papa Francisco la guerra a los movimientos tradicionalistas con el motu proprio ‘Traditionis Custodes’?Para la editorial Angelico Press (Estados Unidos), parece que sí. Al menos así lo dejan ver en el título de ‘De la paz de Benedicto a la guerra de Francisco’, un nuevo libro en el que se aglutinan las respuestas de más de 40 autores de 12 países diferentes al último motu proprio del Papa.
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“Este libro no es, y no pretende ser, una presentación de ambos lados del argumento”, subraya la editorial, sino que “ofrece una variedad de críticas” a un decreto que tacha de “profundamente imprudente y poco pastoral, que adolece de fundamentos doctrinales incoherentes, graves defectos morales y jurídicos e imposibles implicaciones eclesiológicas”.
Si bien la mayor parte de los artículos ya se han publicado online, la editorial justifica que “el propósito principal del libro es reunirlos todos convenientemente en un solo volumen“.
“El período de dos meses que siguió a la publicación del motu proprio demostró que el movimiento tradicionalista no era un fenómeno marginal, sino algo que había ganado una fuerza y simpatía significativas durante los años relativamente pacíficos de 2007 a 2021 (la ‘Pax Benedictina’ a la que el se refiere al título del libro)”, añade Angelico Press.
Antiguos críticos de Francisco
Entre los autores de los artículos que componen el libro, destacan firmas reconocibles, como es el caso de los cardenales Walter Brandmüller, Raymond Leo Burke, Gerhard Müller, Robert Sarah y Joseph Zen. Los dos primeros formaron parte de los firmantes de la ‘dubia’ presentada al Papa tras la publicación de ‘Amoris laetitia’.
Junto a los cardenales destacan también otros miembros de la jerarquía católica, como el arzobispo Héctor Aguer, quien trabajó mano a mano con el Papa cuando ambos eran obispos auxiliares de Buenos Aires y antes de que este fuera destinado por Juan Pablo II a La Plata y Jorge Mario Bergoglio quedase como arzobispo de la capital de Argentina y posteriormente creado cardenal.
Además, entre las firmas se encuentran la del arzobispo Carlo Maria Viganò, quien encarna una de las mayores oposiciones a Francisco dentro de la Iglesia actualmente; y la de Atanasius Schneider, obispo auxiliar de Astana (Kazajistán), quien ha mostrado en diversas ocasiones su cercanía a las posturas de Viganò y quien llegó, en su momento, a afirmar que el coronavirus fuera un “castigo divino por la idolatría a la Pachamama en el Vaticano”.
En cuanto a los laicos firmantes destaca el articulista Juan Manuel de Prada, premio Bravo de la Conferencia Episcopal Española; el reconocido académico argentino Rubén Peretó Rivas, quien no duda en tachar al Papa de “peronista”; y el investigador de la Federación Pro Europa Cristiana y autor del libro ‘El Cambio de Paradigma del Papa Francisco. Ruptura o Continuidad en la Misión de la Iglesia’, José Antonio Ureta.
