El obispo Jesús Catalá defiende el plan director, que prevé una techumbre a dos aguas aunque la Junta de Andalucía aún no ha dado su visto bueno
Si se quiere salvar la catedral malagueña “hay que ponerle el techo”. Así de claro se ha mostrado el obispo de Málaga, Jesús Catalá, después de que se haya presentado un proyecto para cubrir y proteger la catedral andaluza que sufre filtraciones de agua de lluvia que están provocando el deterioro del monumento. Catalá, en declaraciones recogidas por Efe, ha señalado que “está muy claro lo que hay que hacer desde hace años, otra cosa es que unos opinen de forma distinta; pero ese es su problema”.
Y es que el plan director de la sede episcopal contempla el problema y propone que la Catedral Basílica de la Encarnación de Málaga tenga un tejado a dos aguas para evitar problemas de retención del agua de lluvia, filtraciones y humedades. El Obispo ha explicado que la zona de la techumbre es de piedra calcárea lo que hace que con el agua de lluvia este tipo de roca “se disuelve por dentro y se desmorona”.
Ahora bien, los trabajos no se pueden comenzar hasta que la consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía apruebe definitivamente el proyecto. Un proyecto, el plan director, que cuenta con el apoyo de la Escuela de Arte de Sevilla y la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Catalá también destacó que, menos la Junta de momento, “todo el mundo está de acuerdo” incluyendo el ayuntamiento de la localidad.