El Papa ha enviado un mensaje a los participantes en el encuentro mundial de las Comisiones de Justicia y Paz de las Conferencias Episcopales
“La crisis actual ha puesto de manifiesto numerosas contradicciones en el sistema económico y político, al tiempo que persisten desafíos no resueltos que requieren el esfuerzo conjunto de muchos actores”. Esta ha sido la advertencia que ha lanzado el papa Francisco en su mensaje a los participantes en el encuentro mundial de las Comisiones de Justicia y Paz de las Conferencias Episcopales, promovido por el Dicasterio para la Promoción del Desarrollo Humano Integral, que se está celebrando online del 17 al 18 de noviembre de 2021.
De esta manera, el papa ha exhortado a los participantes a “abordar estas cuestiones también en colaboración con otras realidades eclesiales y civiles —locales, regionales e internacionales— comprometidas con la promoción de la justicia y la paz”. Asimismo, les ha animado a continuar su labor “con esperanza, determinación y creatividad”, si bien ha reconocido que lo hace “consciente del desafío que supone el contexto actual, marcado por la crisis sanitaria y social causada por la pandemia de Covid-19, y por los viejos y nuevos brotes de conflicto que están surgiendo, mientras se tiende a retroceder respecto a los compromisos asumidos tras las inmensas tragedias del siglo pasado”.
Para llevar a cabo esta misión, el Papa ha apuntado que “pueden inspirarse ampliamente en las encíclicas Laudato si’ y Fratelli tutti, sacando lo más adecuado de cada una para poder aplicarlo en las distintas situaciones locales y en los diferentes contextos continentales, regionales y nacionales”. Además, ha recordado que “en cualquier parte del mundo el desarrollo integral y, por tanto, la justicia y la paz, sólo pueden construirse a través de estas dos vías: el cuidado de la casa común, y la fraternidad y la amistad social”.
“Se trata de dos caminos que tienen su origen en el Evangelio de Cristo“, ha aseverado Francisco, afirmando, asimismo, que solo “sobre esta base podemos avanzar junto a muchos hombres y mujeres de otras denominaciones cristianas, de otras religiones e incluso con aquellos que no tengan una pertenencia religiosa particular”.