En 2018, aprovechando su condición de licenciado en Teología Bíblica por el Instituto Bíblico Franciscano de Jerusalén y sus años como director de la revista ‘Tierra Santa’, Manuel Crespo Ortega nos regaló una ‘Guía en cuerpo y alma’ sobre los Santos Lugares. Ahora, este donostiarra criado en Cuenca de Campos (Valladolid) repite fórmula para invitarnos a descubrir las ‘Catedrales góticas de España’ (San Pablo), en una visita –tan documentada como amena– a estas joyas de nuestro patrimonio cultural y religioso.
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PREGUNTA.- ¿Qué aporta esta guía respecto a otras ya existentes sobre catedrales góticas de España?
RESPUESTA.- En primer lugar, es un homenaje de la editorial San Pablo a Burgos y su catedral, con motivo del VIII centenario de su fundación. Por otro lado, he pretendido ofrecer a los lectores el DNI del gótico: su nombre (de dónde procede), lugar y fecha de nacimiento. He querido también resaltar las localidades que tienen catedral y que no son capital de provincia. Muchas de ellas se encuentran hoy en medio de la España vaciada. Destaco, asimismo, el glosario etimológico, que está siendo muy apreciado.
P.- El cuerpo, la carne de estos templos, son sus piedras bellamente dispuestas en columnas, bóvedas de crucería, arbotantes… ¿Necesitamos (re)descubrir también su alma?
R.- Claro que sí. Hay que hablar también de las “piedras vivas”, de los creyentes que, a imagen de las columnas, sostienen la bóveda de la Iglesia (con mayúscula) y de los voluntarios que, desde el exterior, apoyan los muros con su fe y actividad, imitando el efecto de los arbotantes. Este es el objetivo principal del libro: ser una ‘Guía en cuerpo y alma’.
Cariño por el patrimonio
P.- ¿Cree que los españoles valoramos el rico patrimonio artístico-religioso de nuestro país?
R.- En líneas generales, diría que sí. Los programas turísticos siempre ofertan las visitas a las catedrales, monasterios, santuarios, conocedores del valor artístico que encierran y algunos por ser testigos de la propia historia de España. Aunque también es de destacar el cariño que se tiene en los pueblos a sus ermitas, conventos, santuarios que, en caso de ser restaurados, sus habitantes son los primeros en colaborar.
P.- ¿Saca la Iglesia suficiente partido a las catequesis que encierran estas joyas góticas?
R.- Una catedral es pura simbología, cargada de mensajes y de catequesis. Pero dado el estatus actual de las catedrales, que no son parroquias y no mantienen grupos de formación, es difícil hacer esta catequesis. Hay que aprovechar a los visitantes y turistas, ofreciendo un sencillo folleto explicativo con mensajes religiosos y proyectando algún vídeo en el museo. Los guías turísticos pueden ser buenos colaboradores, siempre que el cabildo mantenga con ellos encuentros de formación catequética sobre la catedral, su historia y su mensaje.