Bahréin se suma a la lista de países que esperan una visita del papa Francisco. Cuando el pasado jueves acudió al Palacio Apostólico del Vaticano para ser recibido por el Pontífice y, a continuación, por el secretario de Estado de la Santa Sede, el cardenal Pietro Parolin, el jeque Jalid bin Ahmed bin Mohammed Al Jalifa, consejero para asuntos diplomáticos del rey de Bahréin, Hamad bin Isa al Jalifa, entregó una carta con una invitación oficial de parte del monarca de este país situado en el Golfo Pérsico.
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Durante su visita al Vaticano, el jeque Jalid bin Ahmed bin Mohammed Al Jalifa transmitió al obispo de Roma y a Parolin la alta estima que el rey de Bahréin siente por el Papa debido a su “papel fundamental para establecer y promover el diálogo interreligioso y la comprensión entre las diversas culturas y civilizaciones, además de la difusión de la fraternidad humana y de la convivencia entre todos”. El contenido del mensaje del enviado bahreiní fue desvelado por la agencia oficial Bahrain News Agency y relanzado por Fides.
En su conversación con el Pontífice y el secretario de Estado, el consejero para asuntos diplomáticos del monarca del país árabe celebró en particular la aportación que ha supuesto el ‘Documento sobre la Fraternidad Humana para la Paz Mundial y la Convivencia Común’, que Francisco firmó en febrero de 2019 en Abu Dhabi junto al jeque Ahmed al Tayyeb, Gran Imán de al Azhar y figura de referencia para los musulmanes sunníes. Según el jeque Jalid bin Ahmed bin Mohammed Al Jalifa, este texto ofrece los principios para construir “un futuro más próspero para toda la humanidad”.
Bahréin, un “modelo de apertura”
De acuerdo a la nota publicada por la citada agencia oficial bahreiní de noticias, el Papa agradeció la invitación para visitar aquel país que “ama y aprecia” y que consideró “modelo de apertura y convivencia entre sus diferentes componentes sociales”. También habría aplaudido el Pontífice la “constante solicitud en la promoción de la cultura del diálogo y la tolerancia” mostrada por el monarca de Bahréin, destinada a “consolidar y difundir los principios de convivencia y fraternidad entre todos los países y pueblos”.
Este país del Golfo Pérsico formado por 33 islas estableció relaciones diplomáticas con la Santa Sede en 1999. Recuerda la agencia Fides que la primera iglesia católica de la nación se levantó en 1939 en la capital, Manama, en un terreno donado por el entonces emir. El actual monarca regaló otro terreno en el que, desde 2014, se desarrollan las obras de lo que será la catedral de Nuestra Señora de Arabia.