Este sábado 4 se realizó en Mar del Plata (Provincia de Buenos Aires) la tradicional Marcha de la Esperanza, este año en forma presencial. El año pasado, por la pandemia, esta peregrinación se había realizado con una caravana de autos.
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Los fieles fueron convocados bajo el lema: “con María marchamos en esperanza, este es el tiempo favorable”. En esta edición N° 48, una multitud acompañó la imagen de la Virgen que partió de la Gruta de Lourdes y se dirigió a la Catedral, haciendo distintas paradas en parroquias e instituciones.
“Caminamos y avanzamos juntos”
En la homilía de la Misa de cierre de la marcha, Gabriel Mestre, titular de la diócesis marplatense, destacó las tres ideas principales del lema de la jornada: “Con María marchamos en esperanza, este es el tiempo favorable”.
En primer lugar, distinguió la figura de María, quien tuvo el sí decisivo para la humanidad aceptando ser la madre del Jesús y “nuestra madre”. Ella representa el cuidado, la protección de Dios en nuestra vida. Como gran protagonista de la historia, acompaña a sus hijos en las distintas circunstancias de la vida, aun en la pandemia. “En este tiempo difícil imitemos la ternura de María con su pueblo”, pidió el obispo.
El segundo punto que subrayó fue “Marchamos”. Aseguró que “caminamos y avanzamos juntos y en plural. No vamos solos”. Recordó las palabras del papa Francisco nos señala, con claridad, que somos parte de la misma barca. Al caminar juntos todos nos reconocemos como parte de la misma humanidad y la misma barca aceptando el desafío de caminar juntos.
El último punto que preponderó fue el de la esperanza. “Caminamos en esperanza porque sabemos que la última palabra y todo el poder lo tiene Dios”, dijo Mestre.
Finalmente, recalcó que en este tiempo “avanzamos con María en esperanza hacia la Navidad, donde el Jesús niño viene a redimirnos y a darle un sentido distinto a nuestra vida, renovando lo más profundo de nuestro corazón”.
Desde la organización, se había recomendado mantener los cuidados sanitarios necesarios en estos actos masivos. Por tal motivo, los peregrinos acudieron con barbijos, alcohol en gel, y se mantuvo el distanciamiento social. Asimismo, miles de fieles pudieron seguir la marcha por las redes sociales y las transmisiones de la radio diocesana.