El catedrático de Literatura de la Universitat Abat Oliba CEU, Marcin Kazmierczak, analiza la trascendencia narrativa del nacimiento de Jesús
El relato de la Navidad es “una historia de resiliencia paradigmática” que invita a la humildad. Así describe el catedrático de Literatura de la Universitat Abat Oliba CEU de Barcelona, Marcin Kazmierczak, la narración del nacimiento de Jesús. El profesor está al frente del grupo de investigación TRIVIUM, que indaga en el potencial de la literatura para la transmisión de valores.
Kazmierczak destaca que el relato natalicio trata de recordar a través del ejemplo “que la humildad es una de las virtudes fundamentales”. Y es que, subraya, la humildad es una novedad cristiana: “no era una virtud para los filósofos griegos”, especifica. Para los expertos, la historia de la Navidad activa el mecanismo de la mimesis (imitación en la vida real de los valores narrados) para invitarnos a ser humildes.
Para Kazmierczak el relato de Belén habla de que Dios “decide nacer en una familia modesta, sin dinero para un hospedaje. Esto es algo que también aprendemos de esta historia: los cristianos somos seguidores de una persona pobre”. Además, la resiliencia no es solo por las adversas circunstancias que superan María y José, sino por cómo lo hacen. “Se nos presenta una familia que funciona como un espacio de apoyo mutuo, llena de conexiones afectivas. Las conexiones afectivas son consideradas por los especialistas como el pilar central de la resiliencia”, explica.
“La narración del nacimiento de Cristo en un establo tiene un gran atractivo por los valores que transmite”, propone. Y es que en el relato hay valores como “la belleza de la familia, la puesta en valor de la pobreza, la solidaridad entre los humildes y modestos, la ternura de la madre, la protección del padre, la presencia de ángeles y pastores y de elementos de la naturaleza como los animales. Todo unido resulta sumamente atractivo”, concluye.