El sacerdote hizo un análisis de la actual situación política en el país petrolero que cada día se ve más trabada
El sacerdote jesuita Luis Ugalde, ex rector de la Universidad Católica Andrés Bello y un personaje influyente en el ámbito político venezolano, ha abogado por seguir apostando a la negociación entre el régimen de Nicolás Maduro y sectores democráticos en una entrevista al diario El País de España.
Además ha planteado que en estos momentos intentar sustituir al líder Juan Guaidó como líder de la oposición “sería un error”, porque por ahora cuenta con el respaldo internacional, entre estos “el apoyo irrestricto de EEUU”.
Sobre la posibilidad de un revocatorio a Maduro en 2022, el presbítero tiene sus reticencias: “He escuchado algunas objeciones que son muy serias. Si queda revocado Maduro, asume la vicepresidenta, Delcy Rodríguez. La Asamblea Nacional, el Tribunal Supremo, todo el aparato del Estado está en manos del régimen. Hay que pensar serenamente esos pasos”.
Ugalde también considera que las negociaciones, iniciadas en septiembre en México, van a regresar, puesto que “habrá presión de los países cercanos al régimen, y también del lado democrático, para reiniciar conversaciones”.
Sobre las elecciones en Barinas, cuna del fallecido Hugo Chávez, donde el régimen perdió la gobernación y que luego anuló el triunfo del opositor Alfredo Superlano, el jesuita señala que “pueden tener un costo alto para el Gobierno, aún con una victoria forjada. El informe de la Unión Europea será duro con Maduro”.
Por otra parte, ha asegurado que “los partidos opositores saben que están mal y que 2024 (próxima elección presidencial) está a la vuelta de la esquina para comenzar una reconstrucción organizativa”.
“Yo eso, en lo personal, no lo puedo aceptar. Sería divorciarse de la tragedia social que vive el venezolano. Una cosa es calcular el tiempo a conveniencia del desajuste interno que ellos tienen, y otra que se le diga a la gente: ‘espere como mínimo al 2024’”, añadió.
Para Ugalde este escenario “sería una desgracia. Creo que hay que buscar una salida negociada, luchar por adelantar las elecciones presidenciales en un marco de negociación. Es fundamental consolidar y atender los desarrollos políticos internos. La mayor distancia que hay que atender es el malestar actual de la población”.