Los enfrentamientos entre las guerrillas de la Fuerzas Armadas de Liberación (FARC) con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) por el control territorial, desde inicio de 2022 en el departamento de Arauca, limítrofe con Venezuela, ha dejado 27 muertos.
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Jaime Abril González, obispo de Arauca, ha pedido hacer un alto al fuego y “urgimos a que se tenga siempre como bien sagrado la vida de todos y la dignidad de toda persona”.
“Exigimos respetuosamente, pero con toda firmeza, que se deje a la población civil por fuera de las confrontaciones y hostilidades”, ha expresado.
Proteger a civiles
Medios de comunicación colombianos han reseñado que Diego Molano, ministro de defensa del país, denunció que estos enfrentamientos se han originado en territorio venezolano, donde estos grupos armados operan bajo el amparo del régimen de Nicolás Maduro.
A todas esta, el obispo de Arauca ha pedido también “se preste la debida asistencia a los heridos, que se respete la vida e integridad de los retenidos y se dé trato digno a los cuerpos de los fallecidos”.
“Solicitamos a las autoridades civiles, que verifiquen los hechos y se empeñen por proteger la vida e integridad de la población civil de los lugares en donde se estarían presentando las confrontaciones y establecer planes de contingencia y ayuda humanitaria”, acotó.
Foto: Semana
