La entidad ha iniciado una campaña de recaudación de dinero tras el incidente que afectó a 600 personas, en su mayoría inmigrantes
“Sumemos nuestro apoyo a Iquique” es el llamado de la campaña iniciada por la red de Cáritas en Chile para la reconstrucción de las viviendas destruidas por un voraz incendio hace dos semanas, en esa ciudad.
Iquique es uno de los puntos de llegada de inmigrantes, muchos de ellos clandestinos, al país. Es un importante puerto del norte chileno en pleno desierto de Atacama, a 1.800 kilómetros al norte de Santiago, con casi 200 mil habitantes.
En colinas desérticas al sur oriente de la ciudad, se han instalado ‘campamentos’, tomas de terrenos, con viviendas de material ligero, muy precarias, sin servicios básicos debido a que no están en sectores urbanizados. Allí viven familias que no tienen vivienda, principalmente inmigrantes. “Laguna Verde” es uno de esos campamentos que fue totalmente arrasado por el fuego, dejando unas 600 personas afectadas no sólo por la pérdida de sus viviendas, sino también, en muchos casos, de todos sus bienes.
El Director Regional de la Oficina de Emergencia del Ministerio del Interior, Álvaro Hormazábal, dijo que la distribución de las viviendas impidió la labor de bomberos. “Hay pasajes muy angostos que no permiten el paso de los carros. No hay red de agua. El grifo más cercano está a 300 metros de donde trabajaba bomberos”, dijo.
El alcalde de la ciudad, Mauricio Soria, dijo que ante el siniestro actuaron “varios equipos de bomberos de las comunas de Iquique y de Alto Hospicio, y todos los equipos de la municipalidad. Es un campamento y eso hace más difícil la ayuda porque no hay calles”. Soria agregó que el municipio local dispuso dos escuelas como albergues para recibir a los damnificados.
Cáritas Chile ha coordinado la labor de toda la red de las Cáritas diocesanas para lanzar la campaña dirigida a recolectar fondos a través de la cuenta corriente bancaria del Obispado de Iquique. Ese dinero será destinado a la construcción de nuevas viviendas para las familias afectadas. De este modo se ha activado la solidaridad en todas las diócesis y los directivos de Caritas esperan hacer una contribución importante.
Este incendio es considerado uno de los más grandes, con mayor destrucción en la ciudad, en los últimos 60 años. Así lo estimó el comandante del Cuerpo de Bomberos de Iquique, Jorge Medina, quien manifestó que “es muy lamentable y esperamos que no se vuelva a repetir, por suerte no ha cobrado vidas, y si esto hubiese ocurrido de noche sin dudad el escenario y el panorama hubiese sido distinto”.
Esta lamentable y dolorosa tragedia ocurre en la misma ciudad en que hace algunos meses hubo manifestaciones de rechazo a los inmigrantes, incluso con acciones de violencia, como fue quemar sus enseres personales a quienes vivían en carpas en las calles de la ciudad.