Durante todo el año pasado, la organización que gestiona la asistencia y ayuda de la Iglesia a las personas y grupos más necesitados de la sociedad distribuyó más de 1.900.000 raciones para los grupos familiares.
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Desde Cáritas Argentina se gestionan y coordinan los esfuerzos para mejorar los servicios y brindar respuestas a los nuevos desafíos. Esta ayuda llega a través de las sedes parroquiales y diocesanas, centros barriales, establecimientos educativos, y se permeabiliza para llegar a todos los rincones del país, al margen de las iniciativas particulares de cada región.
Las cifras
Frente a la realidad de pandemia y la emergencia sanitaria, Cáritas Argentina se vio obligada a modificar y renovar su estructura para seguir respondiendo, con recursos económicos, a las necesidades de los grupos más vulnerables.
El monto destinado a la asistencia alimentaria fue de $197.826.517. Esta ayuda llegó a casi 580 mil personas de más de 3000 comunidades.
Según informaron, se realizó un importante esfuerzo por mejorar la calidad nutricional de los alimentos distribuidos, con mayor consumo de verduras, frutas, cereales, productos lácteos, frescos y carne. La mayor calidad nutritiva se reflejó no solo en las viandas sino también en los bolsones que llegaron a las familias.
En el comunicado, la organización valoró las alianzas y convenios que se firmaron para mejorar las cocinas de los propios merenderos y comedores. Por este motivo, más de 6 millones fueron destinados a la compra de cocinas, heladeras y freezers para adecuar estos espacios a los refuerzos alimentarios.
Redoblar esfuerzos
Se espera un año todavía complicado en cuanto a la situación social, por lo que será necesario redoblar esfuerzos para sostener en el tiempo la ayuda a las comunidades.
Conscientes de que la acción solidaria marca una diferencia para los hermanos más necesitados, Cáritas Argentina se compromete, una vez más, con la asistencia a los sectores vulnerables de la sociedad. Si bien no tienen respuestas para todas las necesidades, se esfuerzan diariamente para responder a las demandas.
Tal como se hizo en el 2021, continuarán con la firma de convenios y otras acciones para coordinar el trabajo nacional, no solo con la estructura propia sino también con organismos nacionales, provinciales, empresas y ONG.
Anunciaron que acompañarán a las Cáritas diocesanas en la gestión de alianzas que les permitan seguir incorporando alimentos frescos al menú. Asimismo, continuarán con la asistencia en la mejora y renovación del equipamientos para los comedores comunitarios.
