Michel Aupetit, arzobispo emérito de París, es recibido esta mañana del jueves 3 de febrero a las 10:30 h. por el papa Francisco, dos meses después de que presentara su dimisión el 2 de diciembre de 2021. Este encuentro, desvelado por La Croix, será el primero entre el pontífice y el prelado tras una serie de artículos periodísticos –que incluían una relación “ambigua” con una mujer adulta, en el pasado– que precipitaron la decisión de abandonar la principal diócesis francesa.
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Frente al pecado de la soberbia
“Fue una falta de él, una falta contra el sexto mandamiento, pero no total, de pequeñas caricias y masajes que hacía a la secretaria, ésta es la acusación”, desveló el Papa sobre los motivos del cese del prelado francés en una de las ruedas de prensa a la vuelta de su viaje a Grecia y Chipre. Para Francisco, “esto es pecado, pero no es de los pecados más graves, porque los pecados de la carne no son los más graves. Los más graves son aquellos que tienen más carácter angelical: la soberbia, el odio”.
Ahora, Bergoglio y Aupetit podrán conversar cara a cara de esta cuestión o sobre el futuro de la diócesis de París. Una Iglesia que ha sido confiada por el Papa a monseñor Georges Pontier, de 78 años, arzobispo emérito de Marsella y antiguo presidente de la Conferencia Episcopal Francesa que en la actualidad es el administrador apostólico.